Salud

11/6/2020

Salto: Pagani, de Bagley-Arcor, es responsable de la expansión del virus

Este miércoles se conoció un caso de un Covid positivo en la fábrica Bagley-Arcor de Salto.


La patronal salió con los tacones de punta a impedir que se concrete el paro resuelto por el Stia.


La empresa Bagley-Arcor y su dueño, Pagani, pasan a tener la total responsabilidad de que el coronavirus se expanda en la localidad de Salto.


A través de audios intimidatorios, el jefe de planta se dirigió a cada trabajador planteando que “la fábrica no está de paro” y, dejando de lado toda “empatía”, les decía que debían presentarse a su turno.


Finalmente, los trabajadores que se presentaron, en medio del enorme amedrentamiento y del constante repique desde el gobierno de que la enfermedad está controlada o que se avanzó hacia una cuarentena light, fueron recibidos por los delegados que impidieron todo ingreso a la planta.


La familia Pagani, dueña monopólica de empresas en Córdoba y Buenos Aires y que se extendió a diez países fue beneficiada con las excepciones de la esencialidad. No dejó de producir ni un día.


Y, como todas las empresas que vienen funcionando y las que se fueron agregando en las excepcionalidades, ha especulado al milímetro con no aplicar las medidas de seguridad e higiene que garantizarían que no se propague la enfermedad en caso de contagio. Medir la temperatura, poner alcohol en gel es totalmente insuficiente. Los trabajadores mantuvieron contactos, transitaron por áreas comunes, tomaron transportes, fueron a los mismos baños, se contactaron en los cambios de turno y en el fichaje. Les mezquinaron barbijos y los sometieron a controles con el argumento de que alguno se los llevaba en el bolsillo.


Esta empresa a diferencia de criterios usados en otros casos ha obligado a concurrir a la planta a trabajadores de otras localidades afectadas por coronavirus. No tomó medidas de cuarentena con los que venían de Arrecifes, Capitán Sarmiento, Pergamino o Areco.


El propio trabajador contagiado sale al cruce de los escraches en curso y de la campaña que se está instrumentado para culpabilizarlo, explicando que él no ha hecho más que ir a trabajar, a una fábrica a la que venían trabajadores de localidades con casos de coronavirus confirmados.


El Stia resuelve a través de la Comisión Interna el paro ante la confirmación de este caso pero venía permitiendo que la patronal no aplicara los protocolos, por ejemplo en un caso anterior que luego dio negativo, ni respecto a los trabajadores de otras localidades. Tampoco actuó para frenar los niveles de producción que han sido enormemente aumentados para acumular stock. Tampoco garantizó medidas de seguridad e higiene para los camiones que transportan insumos y mercaderías. Han permitido la rebaja salarial de los trabajadores de riesgo.


El intendente Ricardo Alessandro (FdT) sale compungido ahora en los medios, cuando ha permitido esta situación de vulnerabilidad, de peligrosidad y de explotación sin límites en la empresa por la que circulan unos 1.500 trabajadores.


Sale a decir que “la alimenticia no es solidaria” pero no tomó ni toma medidas para imponer las condiciones para evitar los contagios.


No resuelve quién se hará cargo de los hisopados que deben realizarse a los contactos directos y cercanos y a sus familias.


No resuelve la obligación de cierre de la empresa hasta que se realicen los estudios necesarios al conjunto de los trabajadores y se cambie la forma de producción.


Esta en juego la salud de todo el pueblo de Salto.


Es imprescindible que se formen comités populares y obreros para intervenir en forma directa en función de garantizar la salud y la vida de los trabajadores.


Se plantea exigir los testeos, aislamiento en lugares adecuados, garantizar los alimentos y elementos de sanidad a los trabajadores y sus familias.


Hay que imponer que el sistema de producción garantice prioritariamente la salud. Horarios reducidos, distancia social entre los trabajadores, unidades de producción constantes, elementos de seguridad personal como máscaras, cofias, ropas descartables. Elementos de higiene.


Los trabajadores de Arcor deben coordinar su acción de exigencia de cuarentena en todos los casos cercanos, con los de las demás fábricas. Las familias obreras están entrelazadas en todas las fábricas de la localidad.


Hay que encarar la exigencia de las medidas y de la inversión necesaria que la intendencia, el gobernador Axel Kicillof, el presidente Alberto Fernández y las patronales no han garantizado.