Las elecciones del 7 de setiembre en Ctera están dominadas por la manipulación grosera de la dirección de Sonia Alesso y Roberto Baradel, en una elección que la burocracia celeste hasta procuro evitar que la base docente se entere de su realización.

 

Jamás se conocieron los padrones ni por provincia ni por seccional, lo que hace imposible su control en un gremio de más de 200.000 afiliados; eliminaron los apoderados provinciales y seccionales; no se conoce el padrón por urna ni dónde vota cada escuela; los circuitos electorales de votación están organizados para favorecer la votación del oficialismo; no han publicado las planillas de escrutinio; en la mayoría de las jurisdicciones del interior colocaron sólo una mesa de votación por departamento, lo que hace imposible el sufragio de la mayoría de los compañeros por las extensas distancias entre el lugar de votación y las escuelas, dilatan y manipulan la entrega de las credenciales de los fiscales, emitidas ú-ni-ca-men-te por la Junta Electoral Nacional, lo que hace literalmente imposible distribuirlas por todo el territorio nacional. Y la lista es interminable.

 

En Salta, para citar un ejemplo, sobre 53 municipios, sólo hay mesas en ¡13 departamentos! Los compañeros de la Multicolor denunciaron públicamente este atropello e impugnado la elección en toda la provincia.

 

Lo mismo está ocurriendo en decenas de localidades y jurisdicciones, y la Multicolor ha realizado una presentación de impugnación de este fraude a escala nacional en el Ministerio de Trabajo.

 

El fraude de Baradel en Suteba ahora lo tenemos multiplicado en Ctera. Esa es la única política de esta burocracia sindical kichnerista para sostener su aparato, que enfrenta el repudio generalizado por el vaciamiento de la Ctera, la entrega de la paritaria nacional, el aislamiento de todas las grandes luchas de este año –desde la gran huelga de Suteba hasta la lucha heroica de los docentes de Santa Cruz– y la negativa a enfrentar la reforma antieducativa que Macri y todos los gobernadores pretenden imponer con el llamado “Plan Maestro” y la destrucción de la escuela secundaria.

 

Esta manipulación de Alesso y Baradel, avalada por el ministerio de Trabajo y por todos los gobernadores, es la contraparte por la entrega de Ctera de la gran lucha docente de comienzo de este año, cuando dilapidó la enorme energía de los 400.000 docentes movilizados en Plaza de Mayo, en medio de la huelga general indefinida de Buenos Aires, la lucha de Santa Cruz y los parazos nacionales en todo el país.

 

La Multicolor se consolida en todo el país

 

El fraude es la reacción desesperada de la burocracia ante la consolidación de la Multicolor en todo el país. La Multicolor está encabezada por los dirigentes de los principales sindicatos y seccionales recuperados de todo el país e integrada por miles de delegados y activistas antiburocráticos de todas las provincias. Sebastián Henríquez, secretario general del recientemente recuperado Sute de Mendoza; Romina del Plá, secretaria general del Suteba Matanza; Eduardo Gómez, secretario general del Suteba Berazategui; Angélica lagunas, secretaria general de Atén-Capital; Gustavo Téres, secretario general de Amsafé-Rosario la encabezan, junto dirigentes de la directiva de Agmer-Paraná, de Adosac-Santa Cruz, secretarios generales de diez seccionales del Suteba; y dirigentes y delegados de 15 provincias.

 

La votación de la Multicolor será contundente en los sindicatos y seccionales recuperados, y avanzará en todo el país, lo que estará fielmente reflejado en los cómputos de aquellos lugares donde se haya podido controlar y asegurar la voluntad de los compañeros a pesar del enorme cuadro de fraude que denunciamos.

 

El voto de la Multicolor es el voto consciente por una Ctera independiente de Macri y de todos los gobernadores, basada en la democracia sindical, por un plan de lucha nacional por la nacionalización de la educación, la eliminación del Plan Maestro y la defensa de la escuela secundaria, la defensa de la paritaria nacional y del estatuto docente, por un salario básico nacional unificado que cubra la canasta familiar.