Hace algunos días, Pablo Micheli -dirigente nacional de ATE y secretario general de la CTA autónoma- estuvo en Mendoza. Las directivas de ATE y CTA mendocinas se enteraron por los diarios; ¿a qué vino Micheli?

 

ATE Mendoza viene desarrollando un plan de lucha por la recomposición salarial, reapertura de paritarias, bono de fin de año y otras reivindicaciones, y es la única seccional del país en lucha. Los enfrentamientos entre la dirección combativa de ATE y el gobierno son moneda corriente y crecen en intensidad, sobre todo con el ministro Matías Roby, un talibán del mercado de la salud privada.

La CTA autónoma viene de protagonizar una importante jornada de lucha, con paro y movilización, incluso sumó a gremios de la CGT o movimientos de lucha como los feriantes de Guaymallén o la coordinadora de ex ypefianos.

 

Entonces, Micheli ¿vino a apoyar la lucha de la seccional de ATE contra el gobierno? ¿Vino apuntalar la recomposición de CTA y sacar conclusiones para fortalecer los reclamos?

 

Nada de eso: Pablo Micheli vino a apoyar la ruptura por derecha de la directiva de ATE, fogoneada por la UCR y sectores del FpV. También a atacar a la clasista conducción de CTA. Objetivamente, se colocó en el campo del gobierno contra los luchadores, utilizando los argumentos de la gestión provincial.

 

Pablo Micheli nos aclara aún más el panorama: en un pequeño acto público de lanzamiento de su fracción y en los medios escritos, planteó que es necesario un sindicato sin partidos, una impostura si se tiene en cuenta que él formó parte de la fundación de la UP con De Gennaro y que ahora se están matando por el control de los fondos gremiales.

 

Pero va más a fondo, “Raquel Blas es una luchadora, pero se fue con el PO”, por lo tanto, es estratégico recuperar la seccional de ATE Mendoza”: lo que nos dice el secretario general de CTA es que es estratégico desplazar a los luchadores de la conducción de ATE y abortar cualquier tipo de expresión independiente.