Bajo una intensa lluvia se realizó esta mañana una actividad en la puerta de Carrefour Warnes al momento de entrada del turno mañana, contra los despidos y la flexibilidad laboral que la empresa francesa acuerda con Triaca y la conducción del Sindicato de Empleados de Comercio (SEC).

El procedimiento preventivo de crisis arroja como saldo mil retiros “voluntarios” y una rebaja en los aportes patronales.

El acto fue también la respuesta al bloqueo de una actividad de volanteo, la semana pasada en la puerta, por parte del cuerpo de delegados que responde a la fracción de Ramón Muerza, secretario de Organización del Sindicato de Comercio y potencial rival de Armando Cavalieri en las elecciones de este año.

La gerencia del mercado cerró las puertas para evitar una deliberación con el volante de Combativos Mercantiles. De las rejas para afuera 50 militantes con el sonido leyeron un volante de Combativos Mercantiles, llamando a organizar una respuesta del conjunto del gremio, a no distraerse en la interna Cavalieri-Muerza, pedir la apertura de la cuentas de la empresa y no dejar pasar ningún despido. Del lado de adentro 60 obreros con sus delegados escucharon.

Los despidos de Carrefour son la punta del iceberg de una ofensiva de toda la patronal supermercadista. El titular de la Asociación de Supermercadistas Unidos (ASU), Juan Vasco Martínez, se ha quejado públicamente de los “costos laborales” y según algunos medios, nuevas cadenas podrían seguir los pasos de Carrefour y pedir también un preventivo de crisis.

Basta de despidos y ataques a los trabajadores.