Sindicales

3/6/1987|184

Gran victoria de una gran lucha

Adidas: «Exigimos el reconocimiento de la nueva interna combativa»

Dicen los compañeros del comité de lucha

Los trabajadores de Gatic-Adidas vienen de obtener un gran triunfo de una gran lucha: lograron la reincorporación de un activista despedido y la puesta en pie de un Comité de Lucha, integrado por compañeros honestos y combativos.

La vieja Comisión Interna, que se jugó contra la huelga, ha recibido el repudio absoluto de la base de la fábrica y ante la presión de los trabajadores ya algunos delegados patronales han comenzado a renunciar.

Prensa Obrera dialogó con tres integrantes del Comité de Lucha, los compañeros Ricardo Fleitas, Walter Luna y José Luis Videla.

Esta es su crónica de la lucha antipatronal y antiburocrática que han librado.

Prensa Obrera: ¿Por qué salen a la lucha?

Ricardo Fleitas: Veníamos desde hace mucho con problemas de distinta índole: comedor, vestuarios en malas condiciones, supervisores que te molestan y te explotan. El conflicto viene a raíz de que me despiden argumentando que no me necesitaban más (cuando estaban tomando gente) y porque no acepté ser promovido a auxiliar con más sueldo. Al otro día, vengo a fábrica, reúno a los compañeros y les pedí la solidaridad de todos. Todos creyeron y se animaron. Así empezó el conflicto.

La Comisión Interna, en lugar de apoyarnos, nos amenaza que va a haber más despidos, de los que ellos no se hacían responsables y se vuelven a meter adentro. Ante esta actitud, la gente decide formar otra comisión y a partir de ese momento la lucha es por dos puntos: 1) mi reincorporación y 2) que la Cl caduque y se reconozca a la nueva.

P.O.: ¿Hacia mucho tiempo que no tenían un cuerpo de delegados representativo y combativo?

R.F.: Sí, hace mucho tiempo, más de 13 años. En esa época hubo una buena delegada, cuando fue la toma de fábrica. Esta delegada que luchaba, que estaba al lado de los trabajadores, fue asesinada: la degollaron. A partir de ahí, no hubo más una conducción representativa.

José Luis Videla: Estos tipos están desde hace una pila de años y nunca hubo lucha.

P.O.: Ahora existe un Comité de Lucha que representa a los trabajadores. ¿Cómo piensan que hay que consolidar este Comité de Lucha?

R.F.: Queremos que renuncie la C. l. y que sea reconocido este Comité. El viernes, cuando volvimos a trabajar, la patronal se desesperó por hablar con nosotros. Con el compañero Luna, aquí presente, hablamos con el jefe de personal y nos dijo que a ellos no les interesaba si uno u otro era delegado. Así que encaramos la cosa a nivel del Sindicato. Tenemos pensado hacer una asamblea en puerta de fábrica y después ir al Sindicato a exigir que renuncie la C. l. Hay delegados que ya comenzaron a renunciar por la presión de los compañeros.

P.O.: Aquí hay varias plantas, vos trabajas en la N° 1, ¿cómo hicieron para parar las otras?

R.F.: Ya te conté que a los compañeros de mi planta los paré a la entrada y les conté la injusticia que querían hacer conmigo. La gente empezó a decir, “si no entras vos, no entra nadie”. Después de esto, la C. l. no quiso atendernos y creamos la comisión paralela.

Walter Luna: Cuando fuimos a expedición había gente que había empezado a trabajar, hablamos, cantamos y a las 10 de la mañana ya se habían sumado todos.

R.F.: En la Planta 3 veíamos cómo los compañeros se desesperaban por salir, pero los tenían encerrados y con policías adentro. Pero poco a poco, de uno en uno y después en grupos fueron bajando y terminó parando toda la planta. Cuando empezamos la asamblea de la Planta 1, vimos llegar la columna de la Planta 3 y fue muy emocionante.

Una compañera: en Planta 3 se controla más que en Planta 1, de lejos te están mirando, que haces, que no haces, tienen los baños bajo llave.

P.O.: ¿Cómo consideran que deben organizarse las distintas plantas?

R.F.: Hasta ahora, había 11 delegados de todas las plantas. Considero que debe haber una C. l. en Planta 3 y otra en Planta 1, coordinadas ya que son las más grandes.

W.L.: Otra idea es coordinar con las plantas de Córdoba. Cualquier problema que surja, aquí o allá, estar en contacto.