“Viva las luchas obreras”: así se llama la revista producida por los trabajadores que toman la planta gráfica AGR-Clarín. La presentación se realizó a los 65 días de ocupación, en la puerta de la fábrica en Pompeya, allí se anunció que el primer ejemplar ya había sido enviado a la madre de Plaza de Mayo Nora Cortiñas, mientras que el segundo fue comprado por Rubén Schofrin -delegado de Perfil enjuiciado por la patronal- y el tercero enviado mediante correo certificado a Héctor Magnetto, líder del grupo Clarín, para demostrarle que los obreros de AGR se encuentran dispuestos y disponibles para reanudar la producción de manera inmediata y conminarlo a cesar con el lock-out patronal y los despidos.

 

Los obreros exhibieron los números recién impresos en un clima de gran emoción. La revista se vendió en puestos habilitados especialmente a lo largo del trayecto de la movilización en conmemoración por el 24 de Marzo. “Hicimos la revista con los maquinistas de esta fábrica, con los operarios de cada una de las secciones, con la ayuda de los familiares que nos ayudaron a juntar el gasoil necesario para dar energía a las máquinas litro a litro -contó Pablo Viñas, secretario general de la Comisión Interna de AGR-Clarín. El ruido de las rotativas funcionando nos emocionó porque muchos pensamos, al llegarnos el telegrama de despido, que quizá no íbamos a escucharlo nunca más”. 

 

La revista emula el diseño de la revista Viva que se producía en la planta (y que en la actualidad circula con el diario Clarín de los domingos pero impresa en un papel de menor calidad al papel ilustración, con el que habitualmente se imprimía y que es usado para la impresión de la Viva de los trabajadores) contiene numerosas notas que dan cuenta de la situación del conflicto, las cuentas del grupo Clarín, la carta de Las Leonas de la Comisión de Familiares y Mujeres, el homenaje a los docentes en lucha y la pelea contra el cerco mediático, entre otras notas. El rol de director, según figura en el “staff” de la publicación, es ejercido por la “Asamblea de Trabajadores de AGR-Clarín”. 

 

“Para realizar la revista armamos equipos de cada sector -cuenta a Prensa Obrera Viñas-. Se pusieron en movimiento equipos de prensa, de copia, de armado de las planchas, las rotatitvas, impresora plana, la guillotina, dobladoras, mantenimiento y control de calidad. No sólo tuvimos la capacidad de producir, sino que abrimos una nueva área que estuvo integrada por los obreros de esta fábrica: la redacción”.

 

“Me emocioné mucho”, explicó Pablo sobre el momento de la salida de los ejemplares. “Agarramos los primeros números y los comenzamos a repartir entre los obreros. Había muchos compañeros también emocionados. Volver a usar las máquinas es un acontecimiento para nosotros. Es más, hubo un debate en la asamblea, porque todos querían participar del proceso de la impresión de la revista. Acordamos que, para no amontonarnos en las máquinas, debíamos respetar los turnos originales y garantizar la participación de todos”.

 

Los trabajadores anunciaron, además, que se habían producido actos internacionalistas en solidaridad con su lucha en Bolivia, Brasil, Uruguay, Venezuela, Colombia, Chile, España, Grecia y Turquía, y que estaba planteada la interrupción de la impresión de la revista Viva en la planta chilena donde se produce. Por otro lado, exhibieron una factura del ACA (Automóvil Club Argentino) de tres millones de pesos cobrados a Artes Gráficas Rioplatense por los servicios de impresión de su revista, hecho que demuestra que AGR sigue facturando y produciendo de manera tercerizada. Por eso mismo, los trabajadores volvieron a reclamar que la patronal acabe el lock-out y vuelva a producir en la planta de Pompeya.

 

Además de conseguirse en la planta ocupada, los obreros solicitaron a las organizaciones que quieran obtener ejemplares de la publicación que los pidan enviando un correo a [email protected].