Sindicales

10/10/2013|1289

Agreden a ferroviarios del Roca

Randazzo es responsable

El miércoles 25 de septiembre, por la mañana, una agresión de usuarios de la Línea Roca -enfurecidos por demoras del servicio- dejó un saldo de 17 compañeros (conductores, de evasión y de control sobre trenes) con tratamiento de ART, debido a las importantes lesiones infligidas. El origen de las demoras fue un corte de energía que interrumpió el servicio eléctrico por pedido expreso de los bomberos.


El fastidio de los usuarios con los ferroviarios viene siendo fogoneado por el ministro de Interior y Transporte, Florencio Randazzo, que comenzó su campaña de agresiones a los trabajadores con la difusión de videos de un número reducidísimo del personal en actitud negligente a través del kirchnerista C5N. Luego afirmó que los salarios ferroviarios se llevarían la mayor parte de los subsidios estatales, y hasta calificó de "avivada" el reclamo de los tercerizados por la reincorporación de los despedidos y el pase a planta.


Además, la Secretaría de Transporte reparte a los usuarios un pasquín ("Infotren") con la foto de los conductores negligentes en tapa y la leyenda "estamos trabajando en la seguridad". El contexto de las agresiones son las cancelaciones sistemáticas por deterioro de las formaciones, a lo que en el Roca se suma a la falta de personal de conducción y guardas debido a la negativa de la empresa de cubrir las vacantes.


Ante la agresión de los usuarios y las provocaciones de Randazzo, la Unión Ferroviaria mantiene un estricto silencio. Conocida es su alineación incondicional con el ministro que pretende pasar a la cuenta de los trabajadores el colapso ferroviario que provocó la trilogía siniestra de funcionarios, empresarios y sindicalistas alimentada por el kirchnerismo en los últimos diez años.


La Fraternidad, por su parte, sacó un comunicado que endilga el estallido de los usuarios a la lucha de los tercerizados por sus derechos laborales. Omar Maturano y su ladero -el ex subsecretario de Transporte Ferroviario Guillermo Antonio Luna- son y fueron cómplices de la tercerización y del vaciamiento ferroviario. Las grotescas y temerarias afirmaciones del secretario general de La Fraternidad han alimentado la bronca de sus asociados, sin que su organización haya movido hasta ahora un dedo para defenderlos de la persecución laboral que ha montado el ministerio.


Para garantizar la seguridad de trabajadores y usuarios, y remover las causas que originan este tipo de enfrentamiento entre trabajadores, son necesarias las inversiones que no se hicieron en la última década y todo el período anterior; expulsar, juzgar, condenar y confiscar a los empresarios y sindicalistas vaciadores. Y, fundamentalmente, defender las conquistas y condiciones de trabajo de los ferroviarios, además de su integridad mental y física.


Esto no será posible sin una irrupción de la base ferroviaria y la expulsión de la burocracia sindical. Hay que reclamar asambleas por seguridad, para que se respete el convenio, se publiquen las vacantes y se completen las dotaciones de personal. Para vigilar que los controles de salud los hagan verdaderos profesionales, y para que sean correctivos de conductas y no punitivos ni disciplinarios.


Para reclamar la reincorporación de todos los despedidos y que se respete el convenio y la pertenencia a planta permanente de todos los ferroviarios.