Sindicales

31/7/2014|1325

Ajuste camporista en Aerolíneas-Austral

EXCLUSIVO DE INTERNET

Asamblea general para rechazar lo firmado



La burocracia de Apta ha provocado una conmoción entre los técnicos aeronáuticos al firmar Cirielli con la patronal de Recalde un acta que entrega la paritaria tres meses antes de su vencimiento, estableciendo cláusulas de productividad y flexibilidad laboral. La zanahoria es un “incentivo” de 9.000 pesos en dos cuotas condicionado a un “Plan Producción Inspección Anual Aviones”, cuyas metas nadie conoce. El “incentivo” se entrega como anticipo con los meses de julio y agosto, y puede ser descontado de no alcanzarse los objetivos. El acta no menciona al salario y acepta que los objetivos se alcancen sin realizar horas extras. Se trata de unas 5.000 horas mensuales que dejarán de cobrarse incrementando la carga laboral dentro de las 8 horas.

También se eliminan los apoyos técnicos que se realizan desde Buenos Aires a las escalas del interior, las que deberán arreglarse sin esperar relevos, atendiendo indistintamente aviones de Austral o Aerolíneas cuyos modelos y fabricantes son diferentes y requieren de cursos habilitantes.

Los técnicos no aceptan que su tarea tenga exigencias de productividad. El corte de horas extras y apoyos técnicos constituye una rebaja salarial en los hechos. Las sumas en negro constituyen un 50% del sueldo y, sin embargo, tributan para el impuesto al salario que le come un 35% de los ingresos a la mayoría de los técnicos.

Este ataque sin precedentes también se aplica en APA (tráfico y maleteros).

Cirielli, que comparte la mesa con Moyano, en la CGT y en Independiente, quiso ocultar esta destrucción del convenio, actuando incluso a espaldas de delegados afines. Pero el acta se filtró, generando un repudio que se ha expresado en pronunciamientos de rechazo en los cuerpos de delegados de Austral de Aeroparque y de Aerolíneas en Ezeiza. Está planteada la necesidad de una asamblea general, reclamos que ya surgieron en varios plenarios de delegados. Su temario debería plantear el rechazo a lo firmado, el adelantamiento de la paritaria, elegir paritarios de base que intervengan en la negociación, exigir un aumento general de 40% y que la patronal absorba el impuesto al salario. Mientras tanto que los 4.500 pesos queden como suma de emergencia a cuenta de lo que se firme.

Para alcanzar una asamblea conjunta de los técnicos de Austral y Aerolíneas hay que superar los planteos “separatistas”, funcionales al desguace y privatización de Austral, fogoneados por sectores burocráticos desplazados que quieren sacar provecho del desprestigio absoluto en que ha ingresado el cirielismo y que son reacios a una lucha común.

El ciclo de Cirielli se agota con el hundimiento de la estatización K.

La superación de esta burocracia será posible en la medida que los delegados y activistas combativos encabecen el reclamo de Asamblea General y desarrollen un movimiento para derrotar el ajuste camporista.

Corresponsal