Sindicales

14/11/2020

Aluar: rechacemos la amenaza de despido y posterior suspensión

Necesitamos asambleas por sector y el urgente llamado a la quincenal de delegados.

delegado UOM Aluar

Un nuevo ataque de la patronal de Aluar ocurrió en estos días. Amenazaron con el despido de un compañero de larga trayectoria y a punto de jubilarse, por la portación de una botellita de alcohol etílico de la empresa, que con acuerdo del supervisor iba a ser utilizada para la prevención de los contagios de Covid-19.

Fue denunciado en notas de la Prensa Obrera el ascenso de los contagios en Aluar y la aplicación de un protocolo  a medida de la patronal, donde los trabajadores como podían intentaban zafar de los contagios. La estrategia patronal consiste en avanzar con despidos arbitrarios como herramienta de regimentación de una planta que viene recibiendo diversos golpes a sus conquistas y sobre la cual pretende seguir avanzando.

La paritaria a la baja, la reorganización de la producción en función de la especulación del precio del aluminio, a través de la figura de la suspensión son parte de este ataque. Recientemente, la empresa amagó con pagar sólo un 50% del ítem del “reconocimiento grupal” bajo la excusa de la caída de ganancias y finalmente se abonará el 50% restante en modo de acuerdo, pero sin retirar la tesis de que la empresa cerró un ejercicio a la baja, algo que evidentemente los compañeros dan prueba que no, por el despacho de producto terminado,  este pago fue la pieza de cambio entre la interna y la patronal para mantener las suspensiones al 75% hasta marzo.

El intento de despido desató la bronca generalizada de los compañeros, que ya no se aguantan esta situación, brindando el apoyo inmediato al compañero. La determinación del sector de defender al compañero y el creciente rechazo de la medida que iba incrementándose  en otros sectores, implicó un primer recule de la patronal y una victoria de los trabajadores, planteando una suspensión por 20 días que de todas formas debe ser rechazada, en tanto no hay motivos para tal medida disciplinaria. El nivel de rechazo pone de manifiesto que es posible organizar esa bronca para conquistar el retiro de todo tipo de sanción al compañero, y que ese es el camino que debemos tomar para ponerle un freno a la patronal.

La necesidad del llamado a asambleas por sector se hace evidente, pero la actual intervención no solo lo dilata con pretextos sanitarios (como si ir a trabajar con un protocolo patronal fuera menos riesgoso que reunirse en asamblea manteniendo el distanciamiento), sino que tampoco cumple con el llamado a las quincenales de delegados, suspendidos desde principio de año.

Defendamos nuestros puestos de trabajo y nuestras conquistas. Vamos por un plan de lucha votado en asambleas por los trabajadores de Aluar.