Sindicales
25/11/2004|878
ARS: Dos asambleas estratégicas
Primera victoria: desconfianza y rechazo a la “Sociedad de Estado”
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La primera semana de noviembre, la Asamblea del ARS discutió el “proyecto de ley para una Sociedad de Estado” elaborado por un sector de la izquierda (CCC, MST) y la burocracia de ATE (tanto nacional como provincial).
La intervención del PO en la asamblea aclaró dos cuestiones fundamentales: a) el proyecto de ley de “Sociedad de Estado” da poderes absolutos al directorio, nombrado por el gobierno, para formar “uniones transitorias de empresa” y tercerizar los trabajos del Astillero. Sin esperar a la “Sociedad de Estado”, y como adelanto, Alonso, el gerente comercial —un hombre de Solá— saboteó trabajos del ARS derivándolos a un astillero privado, b) El gobierno quiere dividir al nuevo cuerpo de delegados fajándole su propia “agenda”: cambiar el estado jurídico del ARS para avanzar en su privatización (Solá, quien planteó la transformación del ARS en sociedad anónima, luego aceptó la variante de la “Sociedad de Estado” con asociaciones empresariales privadas como un “paso adelante”).
Viendo la asamblea perdida, la burocracia de ATE, la pejotista de Ensenada y la nacional, propusieron votar- más adelante pero no en asamblea, sino en urnas. Lo que está en discusión es la composición del directorio y quiénes van a integrarlo para gerenciar las asociaciones empresariales.
Segunda victoria: los obreros de Astilleros impusieron su agenda
Con la presencia de más de 800 trabajadores, se realizó otra asamblea el martes 9.
Se anunció la firma de un acuerdo con la empresa (ratificado por el Ministerio de Trabajo) para que pasen a planta los 540 contratados. Estos lo harían progresivamente y en cuatro tandas (desde noviembre de este año hasta marzo de 2005). La concreción de esta medida, contra toda bicicleta de la dirección del Astillero y del gobierno, será una derrota de la flexibilidad y de la precarización laboral.
Frente a la convocatoria a marchar a Capital para reclamar por la construcción de cinco naves patrulleras en el ARS y por las leyes navales (que no contemplan los intereses de los trabajadores sino de las patronales navieras), el PO propuso que la movilización fuera encabezada por la consigna de derogación de las leyes y decretos de privatización del Astillero. Esta moción, votada por la Asamblea, coloca la lucha por el Astillero estatal en el campo de la movilización obrera. Más de 600 compañeros marcharon a Plaza de Mayo.
Nueva Fiscalizadora electa por la Asamblea General
Después de la Asamblea, los trabajadores marcharon a la dirección del ARS para reclamar la renuncia del gerente comercial Alonso. Se propuso, también, que actuara la Comisión Fiscalizadora, pero la Asamblea decidió que se eligiera una nueva comisión integrada por tres compañeros. Entre ellos fue elegido Carlos Raimundo, quien defendió en todas las asambleas el rechazo a la Sociedad de Estado.
La nueva fiscalizadora tendrá por función controlar el valor de la hora hombre para los trabajos del Astillero y cuántos compañeros nuevos podrían incorporarse para cubrir las nuevas necesidades. Esto también es estratégico porque la empresa y el gobierno no quieren tomar más trabajadores, pese a la reactivación.
No a la Sociedad de Estado
Pese a estos importantes triunfos, la “Sociedad de Estado” no ha sido derrotada. La CCC, el MST y un sector de la burocracia son principales promotores y llaman a votar Sí en el plebiscito del 24, que está armado para dividir el voto opositor. El PO impulsa una campaña para convertir el rechazo a la Sociedad de Estado en una acción masiva y contundente de las secciones y para que sea la asamblea del 23 la que defina la cuestión.