Sindicales

19/2/2021

Neuquén

Aten votó cinco días de no inicio

Se abre una lucha política en torno a la paritaria docente.

El gobierno neuquino fijó el 3 de marzo como inicio de las clases presenciales. Las asambleas del jueves 18/2 en toda la provincia se inclinaron mayoritariamente por dos propuestas: ambas plantean un no inicio por cinco días.

Una es la que mocionó la conducción del sindicato (TEP-Celeste) que se perfila para ganar en el plenario de directivas de hoy cuando se compatibilicen todos los mandatos; la otra es la que impulsó Tribuna Docente y fue tomada por la Multicolor.

Mucho más atrás quedó una tercera moción de paro por tiempo indeterminado. Todas las mociones expresan la voluntad de lucha de una base que ha sido robada salarialmente durante todo el 2020 y que rechaza la burla ofrecida a último momento por el gobierno de un 10% y algunas sumas no remunerativas para arrimar a un 20%, cuando desde inicios del 2020 hemos perdido más del 40% del poder adquisitivo, con más de la mitad de la docencia bajo la línea de pobreza.

No obstante, el hecho de que todas las mociones fueran de un fuerte impulso a la lucha no surgió de un repollo. Se suma, además, la comprensión masiva que el regreso a la presencialidad que impulsa el gobierno es sin condiciones edilicias, sanitarias y con protocolos que son un dibujo.

Asambleas virtuales regimentadas

Tras sucesivos cuartos intermedios desde el 28 de diciembre, el gobierno ha ganado tiempo y demorado más de seis semanas para hacer una oferta miserable. Incluso con postergaciones de las mesas a último momento.

Durante todo el verano, en pleno enero, en algunas seccionales se fueron produciendo reagrupamientos que organizaron radios abiertas, volanteadas, marchas, etc., que contrastaban con la pasividad de la conducción, apegada a la virtualidad y enemiga acérrima de movilizar. No obstante, cada reunión tuvo la presencia en las puertas de una cantidad de compañeras y compañeros que pusieron presión desde abajo.

Así llegamos a las asambleas que fueron convocadas por el TEP en forma virtual subordinando la soberanía sindical a las decisiones del Ministerio de Trabajo, incluso con amenazas de sanciones para aquellas seccionales que, como Zapala, las convocó presencial y virtual a la vez.

La virtualidad de las asambleas le permite al TEP -que administra el zoom- manipular el orden de los oradores o dejar fuera de la lista a quien se le antoja, no se puede verificar la votación individual por cada moción, etc. La condición de inscribirse previamente dejó afuera a cientos de compañeros que no registran afiliación porque no se cubrieron todas las vacantes durante el 2020. Es decir, un control político de las asambleas basado en el manejo de la tecnología. En Capital, por ejemplo, nuestra compañera Patricia Jure, a pesar de ser la cuarta anotada para la lista de oradores, finalmente nunca fue incluida en la misma. Así ocurrió con muchos más.

Patricia, como refuerzo de la lucha, presentó varios proyectos  como la vacunación de las trabajadoras/es de la educación, la interpelación de la ministra de Educación Cristina Storioni y otros que apuntan a desnudar la complicidad de conjunto, sin grietas, de todos los partidos patronales. Estas iniciativas fueron registrados por importantes medios de la provincia.

Las mociones

Si bien el TEP tuvo que mocionar por cinco días de no inicio, lo condicionó a que nuevas asambleas el próximo 24/2 lo ratifiquen o rectifiquen. Es decir, dejó abierta la puerta para anularlo. Especula que el gobierno pueda maquillar la última propuesta para hacerla pasar la semana que viene y también las líneas generales de la paritaria nacional. Además, el TEP colocó las próximas asambleas luego de la mesa del día 22/2 que tengan ATE y UPCN con el gobierno.

Forzado por el espíritu de lucha de la base, tuvo que tomar los cinco días, pero los condicionó y le otorgó una semana más al gobierno, además de enviarle un mensaje explícito: votamos no inicio, pero tenés la oportunidad, con una nueva dilación, de tirarme una soga para rectificarlo, dejando sin tiempo a la docencia para una reacción desde abajo.

El TEP, aunque tuvo que mimetizar su moción con la nuestra, tiene un contenido opuesto a la que impulsamos, que deja fijado el no inicio desde ahora mismo, con actividades cada día, incluso con nuevas asambleas dentro del no inicio para darle continuidad o no.

Esta moción, finalmente, el resto de la Multicolor la confirmó públicamente sobre la medianoche del día previo a las asambleas. Había muchas vacilaciones porque el frente Bermellón se oponía a la misma y no quiso unificar con los cinco días.

La oposición llegó a las asambleas sin moción unificada, porque el frente Bermellón (Negra-PTS, Gris-MAS, Rosa, CS, etc.), que esperaba ver que hacía el TEP, no hizo campaña por ninguna medida de acción. Incluso sacaron posiciones sobre la oferta del gobierno el mismo día de las asambleas, pero sin emitir opinión sobre el no inicio. Dependiendo de las agrupaciones, el frente Bermellón en algunas asambleas intervinieron sin mocionar medidas de fuerza, y en otras se pronunciaron por apoyar la nuestra. La adaptación al TEP los dejó pedaleando en el aire, porque el TEP recién dos horas antes de las asambleas hizo circular su planteo de los cinco días. Cuando se percató que con cualquier otra medida sería derrotado.

Con lo cual nos preparamos para la nueva batalla política hacia las asambleas del 24/2 no solo para ratificar el no inicio de cinco días, sino las actividades de cada día y las nuevas asambleas dentro del no inicio.
Saldremos del congreso de Tribuna Docente fortalecidos para esa batalla política.