Sindicales

10/2/2023

Avellaneda: precarización laboral y salarial en el municipio

Abajo el ajuste de Ferraresi.

Jorge Ferraresi.

Las condiciones con las cuales trabajadores y trabajadoras municipales de Avellaneda ejercen sus tareas son paupérrimas. Explotando el trabajo en negro, mediante figuras como el monotributo, el cooperativismo, las pasantías y el trabajo solidario (por un viaje de egresados). Esto repercute de forma directa tanto en sus salarios, para para los no formalizados como aquellas y aquellos que se encuentran en planta permanente.

Hombres y mujeres que realizan sus tareas sin los elementos básicos de labor, ni ART. Sufriendo la amenaza de accidentes peligrosos. Es moneda común verlos viajar en la caja de camiones, peor que ganado.

Salarios de pobreza

Actualmente, quienes realizan tareas a cambio del Potenciar Trabajo (limpiando edificios públicos, calles y plazas) reciben de forma mensual menos de $34.000, con la amenaza de perderlo, como lo hicieron 160.000 trabajadores por decisión del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación. Los casi treinta y cuatro mil son una fuerte herramienta de ajuste para les laburantes en blanco, con un básico miserable de $40 mil. El resto del sueldo se compone de “extras” o “plus” en negro, no incluidos en aguinaldos, ni en los aportes jubilatorios.

La gestión Ferraresi (Todos-PJ) es la mayor flexibilizadora. Mientras por medios y redes sociales la Gestión A publicita un aumento del 103% en los ingresos de su personal, la realidad en los bolsillos de los laburantes no es así. La inflación les ha ganado por mucho. Mientras el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) da cuenta que “un hogar compuesto por dos adultos y dos niños precisó $152.515 para no ser considerados pobres, la canasta alimentaria ascendió $ 67.187 para no caer bajo la indigencia. A menos de diez kilómetros de Casa Rosada, el intendente peronista de Avellaneda abona salarios básicos a los municipales por debajo de la línea de la pobreza e indigencia.

Jorge Ferraresi también decidió no darle bono de fin de año a sus trabajadores y trabajadoras, pero si regalarle el no pago del impuesto municipal a grandes pulpos capitalistas, como la petroquímica contaminante Rizen-Shell.

Para poder llevar adelante el ajuste, el presidente del Partido Justicialista de Avellaneda se vale del lema “divide y triunfaras”. Actualmente les municipales son representados por cuatro gremios: la Asociación de Empleados del Estado (ATE), en puja interna posterior a la elección de comisión interna; la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN); el Sindicato Unión de Municipales de Avellaneda (Suma), creado por el propio Jorge Ferraresi; y el Sindicato de Trabajadores Municipales de Avellaneda (STMA). Este último es el que posee la mayor cantidad de afiliados, e integra la Federación de Sindicatos de Trabajadores Bonaerenses (FeSiMuBo), conducida por el histórico burócrata Rubén “Cholo” García, quien expresó la necesidad de que la provincia y los municipios convoquen a una mesa por el salario. Mucho discurso pero poca acción. La famosa mesa pareciera ser parte de la rosca en la formación de las listas provinciales y municipales, hacia octubre, que por discutir las paritarias.

Recortes y aprietes del municipio

Desde la oficina de personal de la Municipalidad se efectúan descuentos injustificados. Robos a los míseros salarios. “Ni tiene otra palabra. Cuando se consulta a las oficinas por el motivo del descuento, aluden a supuestas llegadas tarde, olvido de fichajes, etc. Incomprobables, mentiras. Si pedimos iniciar el reclamo administrativo por nota, nos amenazan con que el descuento será aún mayor si buscamos indagar. Es decir, nos han llegado a contestar ‘si hacés el reclamo te van descontar todo un día porque en verdad faltaste, por eso sólo te lo consideramos llegada tarde‘ (…) como si fuera un favor”, informa un trabajador municipal.

“Vengo de años de pases, castigos y licencias psiquiátricas como consecuencia de reclamar”, quien agrega que “hay bronca, pero son pocos los que reclamamos por temor. El Ejecutivo aprieta con favores, que de verdad son derechos. Como los planes de viviendas, horas extras y la promesa de efectivización. Y eso hace que les tengan miedo o sientan que le deban un favor”, añade.

Por una salida de la clase obrera

La lucha que llevan adelante trabajadoras y trabajadores del Hospital Municipal Veterinario por paro de actividades, contra las precarias condiciones de labor y salariales, pone de manifiesto la necesidad de multiplicar esta lucha en todas las delegaciones y lugares de trabajo y ganar las calles contra el ajuste de Ferraresi. Contra el trabajo en negro, por el pase a planta permanente de todos y todas aquellos y aquellas que realicen tareas en y para el municipio. Por un salario igual a la canasta básica. Por el fin de todo recorte injustificado. Para todo esto es urgente que los sindicatos rompan con el gobierno, y convoquen a asambleas en todas las dependencias, que definan un plan de lucha.