Sindicales

16/9/2010|1146

Bahía Blanca: No se puede defender a la CTA local sin enfrentar a Yasky y a Micheli

En la regional Bahía Blanca, las elecciones de la CTA tienen un contenido especial. En 2006, la burocracia de Yasky-De Gennaro (unida) fue derrotada por la actual conducción (Gandolfo), que estuvo apoyada por sectores combativos del activismo docente. Ahora, Gandolfo decidió no presentar batalla a nivel nacional y provincial contra ambos sectores de la burocracia. La política de refugiarse en el “pago chico” debilita el reagrupamiento de luchadores y activistas que necesariamente debe tener un alcance nacional y de conjunto para reorientar la central. La supuesta prescindencia de Gandolfo golpea a los docentes, quienes pugnan por reabrir la paritaria ante el ruinoso acuerdo de la Celeste con el gobierno, y a los estatales los que necesitan un plan de lucha por el salario, mientras la Verde de ATE desgasta con paros aislados y sin programa.

Esta “prescindencia” es más negativa aún a la luz de la paliza que sufrió la Celeste en la elección de Ctera en Bahía, ya que hay un clima antiburocrático que debe ser explotado.

Lo que ocurre es que la lista de Gandolfo no es “prescindente”. Con el argumento de “proteger” a la CTA local recuperada, la nómina está colmada de degennaristas declarados. Incluso se organizó un plenario con Rigane, el número dos de la lista degennarista nacional. Esto le confiere a la Lista Lila bahiense el carácter de colectora de Micheli-De Gennaro.
Gandolfo, además, no llamó a parar el 1º y 2 de septiembre, cuando sí lo hicieron decenas de miles de docentes de la provincia. Lo que le hace el juego a la burocracia no es hacer los paros, sino defeccionar de ellos.

El 23 de septiembre hay una alternativa para volver a manifestar el plebiscitario repudio a Yasky. Los votantes de la Lila pueden manifestarse nuevamente contra la burocracia, sin disipar ese repudio en la variante degennarista o su colectora local. La misma opción tienen los estatales opositores a la Verde: votar a la única lista que enfrenta realmente a De Gennaro, la Lista 3. Cada voto al Frente de Unidad Clasista refuerza un reagrupamiento para recuperar la CTA nacional.