Sindicales

3/4/2018

Bancarios: parar con todo el 6 y plan de lucha hasta quebrar el techo salarial

Triaca “decretó” un aumento del 7 por ciento.

Tribuna Bancaria

Después de varios meses de negociaciones, el 23 de marzo pasado el gobierno –a través del Ministerio de Trabajo– resolvió por decreto un "aumento” del 7 por ciento para los trabajadores bancarios. Este atropello del ministro Triaca fue presentado como un resguardo de la “paz social” y, en el colmo del cinismo, como un acto en defensa del "derecho alimentario de los trabajadores”.


Esto, luego del rechazo del gremio a un ofrecimiento patronal verdaderamente vergonzoso: 15% en tres pagos y una reducción del 50% del bono del Día del Bancario.


Si existe algo que atenta de lleno contra el derecho alimentario de los trabajadores es el ajuste salarial y la reforma laboral que están pactando el gobierno y las patronales con “los gordos” y otros grupos de la CGT. Esto, mientras avanzan las paritarias a la baja de entre el 12% y 15%, cuando la inflación se dispara empujada por la devaluación y los tarifazos.


El decretazo de Triaca se da en el marco de un clima de malestar y de deliberación que recorre al gremio. Crece la convicción de que solo con un plan lucha progresivo, que desemboque en la huelga general, es posible quebrar el techo salarial y lograr la defensa de los derechos amenazados.


¿La Bancaria está evaluado seriamente está perspectiva –que se desprende del fracaso de sus paros aislados– o va a sumarse al pelotón de los que aceptan los topes oficiales? El primer sindicato en cerrar por el 15% en cuotas fue Aceiteros de San Lorenzo, miembro de la Corriente Federal que encabeza Palazzo. Un acuerdo así sería un golpe al bolsillo de los bancarios y también a las pretensiones de Palazzo de representar algo diferente a la burocracia sindical colaboracionista.


Los coqueteos con Moyano –quien dilapidó la movilización del 21F llamando a “votar bien en 2019”– nos han llevado a una encerrona.


La base ya mostró su disposición combativa sobradamente y hay fuerza de sobra para seguir luchando. Se vio en la intervención en las movilizaciones de diciembre contra la reforma previsional, en las asambleas autoconvocadas de enero, en el paro y la marcha masiva del 8M.


Pero la clave, para que esa voluntad no se disipe, es que nuestro sindicato sostenga un plan de lucha, de acciones y paros escalonados, que concluya en la huelga indefinida.


El paro del 6, que seguramente será contundente, al igual que la movilización, debe ser el trampolín para retomar la iniciativa.


Por el rechazo a la nefasta resolución de aumento del Ministerio de Trabajo. Contra el techo salarial.


Impulsemos asambleas con mandatos de todos los sectores para decidir.


Por un congreso de bases de todo el gremio bancario.


Vamos por paros progresivos y la huelga general hasta romper el techo salarial.


Que las cámaras patronales cumplan el fallo judicial y paguen el 1% del aporte solidario y el pago de las cláusulas gatillo vencidas.


Por la defensa del convenio colectivo de trabajo.


Todo el apoyo a la lucha de los trabajadores del Banco Provincia.