Luego de la amenaza e inminencia de un paro de 72 horas a nivel nacional, la Asociación Bancaria logró destrabar el cobro del convenio paritario para 2017, que venía de una larga disputa generada por la negativa de las patronales y el Gobierno, a pagar el acuerdo salarial que había sido alcanzado en el mes de noviembre pasado y suscripto por la mayoría de las cámaras.

 

El convenio establece un aumento del 19,5%, más un 4% compensatorio por la inflación 2016, y un bono por el día del bancario que oscila entre los $21.600 y los $39.000, según las distintas categorías.

 

Esto supone un golpe para el gobierno en su política de aplicar un techo salarial del 18% en cuotas, tanto para el sector estatal como el privado. La amenaza de un paro general de 72 horas por parte de los bancarios de todo el país fue lo que decidió a la gran banca y al macrismo a aceptar el acuerdo.

 

La bronca de los trabajadores por la negativa al pago y por los ajustes que vienen desarrollando en los lugares de trabajo, hacía presumir una adhesión masiva a la medida.  Para el gobierno suponía un elemento de crisis, cuando tiene por delante, entre otras, las paritarias de los docentes de todos los niveles, gremios donde las direcciones como los Suteba combativos ya anunciaron paros de 48 horas para romper el mismo techo salarial.

 

En este cuadro, la dirección de La Bancaria, que encabeza Sergio Palazzo, en su deseo y decisión de firmar el acuerdo sin llegar al paro, renunció a defender la pre-paritaria. Aceptó que el 19,5% fuera una cifra anualizada que quedará por debajo de la inflación, en momentos en que se anuncia una nueva catarata de tarifazos. La primera versión del acuerdo establecía el aumento hasta abril, donde reabría nuevamente la negociación. La dirección del sindicato tampoco consiguió más puntos de aumento por estirar el acuerdo por 12 meses. 

 

La Bancaria reivindica una nueva “cláusula gatillo” por la cual se reajustará el porcentaje de aumento si la inflación supera, en algún momento del año, el 19,5 por ciento. Esto representa un principio de indexación que deberá ser custodiada por los trabajadores por medio de la lucha.

 

El otro tema crítico que La Bancaria cedió en la mesa de negociaciones, es el del impuesto al salario. Con la nueva escala de Ganancias y la de los sueldos del sector, la totalidad de los trabajadores bancarios seguirá pagando o pasará a pagar ese injusto impuesto. Ante el rechazo del gobierno de pagar un bono de compensación, una buena parte del bono por el día del bancario será absorbido por la AFIP.

 

Con la perspectiva de preparar un gran paro de 72 horas por todos nuestros reclamos, Tribuna Bancaria realizó un acto el día jueves 18 de febrero en donde intervino Marcelo Ramal, legislador del Frente de Izquierda, desarrollando toda una perspectiva de nuestra pelea.

 

Desde Tribuna Bancaria, consideramos que había terreno de sobra para dar esa pelea y defender el acuerdo alcanzado en noviembre. Está planteado hacer un balance en las asambleas de los lugares de trabajo donde tenemos que discutir como enfrentamos el ajuste en los lugares de trabajo, impulsamos la pelea contra el impuesto al salario y nos sumamos al planteo de muchos sindicatos de la necesidad de un paro nacional ya para derrotar el ajuste, por paritarias libres, por la abolición del impuesto al salario, contra los despidos y por el triunfo de todas las luchas del movimiento obrero.