Las últimas semanas han sido bastante conmocionadas para los habitantes de la Villa Los Piletones (Soldati). Desde el vamos, las viviendas que empezaron a construir “Las Madres” al lado del barrio generaron desconfianza: a simple vista se puede ver que las futuras “viviendas” no tienen cimientos y que las paredes son de… ¡telgopor! (ya se volaron algunas veces por el viento). Muchos vecinos entran a trabajar en la obra a través de distintas organizaciones sociales. Trabajan 10 horas por día (y 7 los sábados) sin que se respeten sus derechos laborales (en negro, sin convenio, obra social ni jubilación).

 

La semana pasada un numeroso grupo de vecinos se congregó frente a la entrada de la obra, haciendo un piquete con gomas y fuego. Reclamaban que se pare la obra por la pésima calidad de la construcción. Fue una reacción de los vecinos contra las nuevas “construcciones sociales” de Telerman. Aunque ni siquiera se sabe si esas casas van a ser destinadas para la urbanización del barrio, los vecinos tienen en claro que no los quieren como vivienda. A este clima aportaron las varias docenas de Prensa Obrera Nº 980 (“Telerman-Bonafini Construcciones”) que circulaban por el barrio denunciando “la falsa urbanización de Piletones”. Los punteros del barrio esparcieron la mentira de que el Polo Obrero y otros activistas “van a prender fuego la obra”, “el Polo Obrero los quiere dejar sin trabajo” (¡¿?!) Ellos (y ellas) están muy interesados en que la obra siga, para poder lucrar con la venta de viviendas, como hacen siempre.

 

Pero los vecinos saben quién está de cada lado. El Partido Obrero y el Polo obrero plantean:

 

– ¡No a la degradación de la vivienda popular!

 

– ¡No a la degradación del trabajo!

 

Unidad de trabajadores y vecinos por: Derechos laborales y sindicales para los compañeros, blanqueo bajo convenio, jubilación, obra social. Jornada de 8 horas por el mismo salario. Estabilidad laboral y garantía horaria, si la obra debe pararse por su pésima calidad, los compañeros tienen derecho a seguir cobrando su sueldo hasta el reinicio de las obras. Por la urbanización del barrio bajo control de los vecinos. Por un verdadero plan de vivienda que resuelva el problema habitacional de todos los habitantes de Los Piletones, incluidos los inquilinos. Por viviendas dignas, que una comisión de vecinos, trabajadores y profesionales, independientes del gobierno, fiscalice las obras y la calidad y durabilidad de las mismas. Que la Corporación del Sur y todas sus tierras queden bajo control de los trabajadores y vecinos de la ciudad, para un plan integral de desarrollo de nuestros barrios, y no para la especulación inmobiliaria y el turismo. ¡Por una ciudad para los trabajadores!