Sindicales

16/4/2018

Basta de asesinatos y agresiones a los choferes

Asamblea general del gremio y paro nacional. Declaración de la Agrupación Clasista de Trabajadores de UTA

La Naranja - Agrupación Clasista de Trabajadores de UTA

El paro de todas las líneas de colectivos del Oeste en repudio al cobarde asesinato de Miguel Alcaraz de la 620, fue arrancado por la furia de los choferes contra la patota de la UTA que, a trompadas, quiso circunscribirlo solo a la línea. Hay un reclamo justo y generalizado en la base del gremio para que pare la UTA en todo el país.

 


Nada se hecho por la seguridad de los choferes. La colocación de cámaras de video, son más para controlar al chofer que otra cosa. Pero se mantiene la desprotección física del conductor, los diagramas arbitrarios de horarios nocturnos, la ausencia de iluminación en recorridos y las zonas liberadas.

 


La UTA se limita a la denuncia policial, que da lugar a una parodia de reforzamiento de vigilancia por algunos días. Y todo sigue igual. 

 


La violencia reiterada contra los choferes es la gota que rebalsa el vaso de un deterioro general de las condiciones de trabajo y el nivel de vida. Un convenio a la baja de 15% en cuotas, que lleva a una pérdida acumulada de más de 20% del poder adquisitivo; despidos arbitrarios y sanciones generalizadas; pago en negro; diagramas incumplibles. Una situación que ha llevado a luchas fuertes que salen desde abajo, como el gran paro con movilizaciones del Expreso Lomas, los paros en la 114, 160 514, por falta de pago. Y antes la gran huelga cordobesa y la movilización de los Autoconvocados.

 


La UTA se ha convertido en un aparato antiobrero que a trompadas y palazos defiende los intereses de las cámaras patronales y el Ministerio de Transporte. Tiene su propia participación en el reparto de las líneas entre los grupos empresarios que lucran con los subsidios y entre los proveedores de chasis y carrocerías. Hacia los trabajadores, frena toda protesta e impide con fraudes e intervenciones el surgimiento de delegados antipatronales.

 


Hay que superar esta situación miserable de los trabajadores con la organización independiente de activistas y delegados honestos. Reclamar la solución integral de la seguridad del chofer – cabinas blindadas; diagramas; iluminación de recorridos, vigilancia zonal. Ni una muerte más evitable de un compañero.

 


Pero también: reapertura de la paritaria, por un aumento de 35% y condiciones dignas de trabajo. Frenar los despidos y sanciones arbitrarias de “disciplinamiento” y el trabajo en negro. Inmediato paro nacional por este programa, no como réquiem de una muerte más. Inmediata asamblea general del gremio.

 


Democratización del gremio:

 


Fuera la patota – un año de antigüedad como único requisito para presentarse a cualquier cargo – representación de las minorías – elección de directivas seccionales terminando con todas las intervenciones.