Sindicales

29/8/2002|769

Buenos Aires: Una provincia militarizada

El operativo de “seguridad” ha militarizado calles, cruces y estaciones. Ha minado los barrios con una amplia gama de exponentes del aparato represivo en un operativo conjunto entre la Provincial, la Federal y la Gendarmería.


Ahora, los trabajadores y el pueblo estamos “protegidos” por los responsables del gatillo fácil, las mafias policiales, implicadas, entre otras cosas, en el secuestro del chico Peralta por la Gendarmería coimera y contrabandista.


El mismo día que comenzó el operativo, dos compañeros del Partido Obrero de San Martín que habían estado pegatinando, fueron increpados frente a la estación del ex ferrocarril Mitre por dos gendarmes. Eran las 10 de la noche cuando los compañeros fueron patoteados y amenazados violentamente con métodos y frases propias de la dictadura militar: “Para los jóvenes como ustedes esto va a cambiar”, “ahora estamos nosotros en la calle”, “de esto no digan nada, no abran la boca, porque los vamos a hacer boleta, esto no pasó”.


Inmediatamente se puso en conocimiento de los medios de prensa lo sucedido y se radicó la denuncia en la Fiscalía N° 1 de San Martín a cargo del doctor Héctor Scebba.


El jueves 15, más de 80 personas respondieron a una convocatoria del Partido Obrero en el lugar de los hechos para repudiar la represión. Participaron delegaciones del Partido y del Polo Obrero de Tigre, San Fernando y Villa Zagala. Organizaciones de izquierda, centros de estudiantes y asambleas populares se hicieron presentes trayendo su adhesión. Durante dos horas se cortó la calle y los oradores denunciaron lo sucedido, responsabilizando al aparato represivo de la muerte de trabajadores y luchadores, vinculándolos con la ola de violencia que recorre la provincia de Buenos Aires, los secuestros express, el caso Diego Peralta. Subrayaron también que el accionar represivo de las fuerzas de “seguridad” y su propia descomposición, son claras expresiones del derrumbe del gobierno. Las intervenciones cerraron reclamando que se vayan todos y exigiendo una Asamblea Constituyente con poder.


La marcha que recorrió la peatonal de punta a punta, entonó consignas contra el gobierno, la represión y la Gendarmería, e inundó la calle con mariposas denunciando la situación y reclamando: ¡¡Fuera la Gendarmería!!


Lo sucedido no fue un hecho casual y aislado. Situaciones similares se repiten en las estaciones y en los trenes. Los colectivos son detenidos y el pasaje completo requisado e indagado. La Av. General Paz se ha transformado en una zona de riesgo para estudiantes secundarios, desocupados, vecinos y trabajadores.


La ola de violencia con la que se pretende controlar al gobierno de la provincia para condicionar la sucesión presidencial es la excusa para el despliegue de estos operativos y para la impunidad de su accionar represivo. En nombre de la ley, se ejercitan en violarla instituyendo una suerte de estado de sitio para el conjunto del pueblo.


Es necesario acabar con el aparato represivo y para ello hay que echar a este régimen político con una fuerte y sostenida movilización que termine la tarea iniciada el 19 y el 20 de diciembre; un nuevo Argentinazo para que se vayan todos y el poder pase a una Asamblea Popular Constituyente y soberana. ¡Fuera Duhalde y el FMI! ¡Fuera la Gendarmería y todo el aparato represivo!