En el marco del retorno sin condiciones a la presencialidad el gobierno de Larreta y la ministra de Educación Acuña convocó a la mesa paritaria docente. El gobierno porteño hizo una oferta del 34% en cuatro cuotas que deja al salario docente bajo la línea de pobreza. De los diecisiete sindicatos de la Ciudad solo Ademys, el sindicato combativo dirigido por la multicolor, rechazó la propuesta.

La propuesta del gobierno consiste en 3 cuotas: 12,8% en marzo, 8,8% en julio y 10,4% en octubre. A esto se le suma una actualización del 2% del fondo nacional de incentivo docente (Fonid) por parte del gobierno nacional lo cual totalizaría un 34% sobre el salario inicial de febrero. La pauta inflacionaria fijada en el presupuesto nacional en 29% es una ficción para establecer un techo paritario.  Sin embargo, el propio Banco Central a través del REM (un relevamiento de expectativas del mercado) prevé una inflación del 50%. Lo cual indica que los docentes perderemos 16 puntos de nuestro salario. Otra vez una paritaria a la baja.

Salario de pobreza

El salario inicial para un docente con jornada simple en marzo quedaría fijado en $ 40.887, no obstante, en la Ciudad la canasta básica total, que marca la línea de pobreza, en enero estaba en $54.366. Larreta y Acuña pretenden esquivar esta realidad señalando que en el caso de los docentes de jornada completa el inicial alcanza $81.744. Pero la Dirección General de Estadística y Censos (DGEyC) del gobierno considera que aquellas familias que perciben un ingreso menor de $83.500 están en una situación de fragilidad cercana a la pobreza. Por otra parte, este planteo naturaliza la realidad de los trabajadores de la educación que tienen que acceder a dos o tres cargos para cubrir las necesidades básicas. La pandemia ha agravado doblemente la situación, en primer lugar, extendiendo e intensificando la jornada, en segundo, se verifica un fenómeno de creciente desocupación en la docencia ante los obstáculos que impone el gobierno para el acceso a los cargos como parte de su plan de ajuste.

Achatamiento de la escala salarial

La ministra Acuña presenta engañosamente que los docentes con antigüedad cobrarán un salario significativamente mayor. Pero la realidad es que los docentes hasta los 12 años de antigüedad cobran el mismo salario que alguien que se inicia. Esto constituye una confirmación del achatamiento de la escala salarial. En relación al supuesto blanqueo del salario que se llevaría adelante, lo cierto es que las sumas que se incorporan como remunerativas, es decir, pasibles de descuentos, no serán bonificables, o sea que no se les aplica un plus por antigüedad. La cruda realidad es que el salario básico docente en la Ciudad de Buenos Aires está por debajo de los $12.000.

Un ataque al poder adquisitivo que la burocracia convalida

Ya con la primera reunión desde Ademys planteamos una actualización del 50% para toda la escala que llevaría el inicial a $55.000 pesos en línea de la recomposición del salario. Solo Ademys rechazó esta propuesta que mantiene en la pobreza a los salarios docentes en el contexto de una crisis económica y sanitaria que los gobiernos descargan sobre el conjunto de la clase obrera. El conjunto de sindicatos amarillos, como la UDA, ha avalado sin más el ataque al salario de Larreta. La UTE-Ctera declaró que pondrá la propuesta a consideración de los plenarios de delegados. Una impostura total teniendo en cuenta el antecedente reciente en ocasión de la reapertura de escuelas. La conducción Celeste de la UTE-Ctera fragmentó la deliberación de la docencia en un cronograma de plenarios informativos en los que no resolvió ninguna medida de lucha por las condiciones de apertura. La Celeste cacarea en redes sociales, pero no lucha ni organiza las escuelas. Han llegado al ridículo de desdecirse de sus propias declaraciones mediáticas con el único objetivo de bloquear la organización del gremio. En definitiva, su accionar convalida el rumbo ajuste a la educación y el salario fijado por Larreta.

La integración de la conducción de la UTE al gobierno nacional la obliga a avalar el pacto social que intenta imponer Alberto Fernández. Es por esto que la Celeste acepta una paritaria que se enmarca en el techo impuesto por el ministro nacional Martín Guzmán. En esta línea, la UTE festejó el acuerdo de miseria que la Ctera firmó en la paritaria nacional con Trotta, aún cuando para la docencia porteña eso implica un aumento del 2% a cobrar recién en septiembre. Esta orientación de la Celeste le impone la necesidad de garantizar la paz social con el gobierno de Larreta.

La docencia debe sacar conclusiones sobre el papel que está desempeñando la burocracia sindical y su alineamiento con gobiernos que llevan adelante un plan de ajuste sobre los trabajadores para garantizar los compromisos asumidos con el FMI y los organismos de crédito internacional.

La necesidad de plantear la continuidad del plan de lucha

La pelea por el salario y la reapertura con condiciones de las escuelas es una pelea de alcance nacional. Es preciso que la docencia de la Ciudad le dé continuidad al plan de lucha iniciado, sumándose al paro convocado para #8M. En un gremio eminentemente femenino están a la orden del día las reivindicaciones de las mujeres que son cabeza de hogar y sobre quienes recaen las tareas de cuidado. El golpe al bolsillo docente, la ausencia de dispensa por cuidados de menores o convivencia con pacientes de riesgo son parte de un programa de la regimentación de las docentes y las mujeres trabajadoras en general.

Se impone la tarea de organizar el paro empalmando con las seccionales opositoras y autoconvocatorias del resto del país, y las acciones de denuncia callejera intentan abrir un canal para luchar, que debemos acompañar demostrando la necesidad de intervenir de forma independiente de las burocracias y los gobiernos para defender la educación, la salud y el salario.

Tribuna Docente, la Unión de Juventudes por el Socialismo, el Polo Obrero y el Partido Obrero toman la causa educativa como una lucha de todos los sectores explotados y plantean un programa que privilegie las necesidades y el interés de la población trabajadora y un plan de lucha común, por:

-Salario igual a la canasta familiar.

-No al impuesto al salario.

-Nombramiento de cargos docentes estatutarios.

-Seguro al docente sin cargo equivalente a un salario inicial.

-Pase al estatuto a todes les docentes precarizados.