Sindicales

15/10/2014|1336

Camioneros: otra entregada


El 12 de abril, un enfrentamiento a tiros entre los seguidores de Dainotto (secretario general de la Federación de Camioneros de Santa Fe) y los del secretario gremial del sindicato, Rubén López, dejó un muerto y cuatro heridos de bala.


Un mes después, Dainotto presentaría la renuncia. El ex dirigente camionero propuso devolver 2 millones de dólares que robó para quedar en libertad. Cualquier similitud con bandas narcos para quedarse con la caja y eliminar al competidor no es coincidencia. La recesión y el ajustazo pondrán estas “guerras” por preservar las cajas en el orden del día.


Mientras tanto, es vox populi que todas las empresas encuadradas en camioneros han despedido, directa e indirectamente (retiros voluntarios, jubilaciones anticipadas, etc.). En correos, varias ya plantean la venta por problemas financieros; otras, el cambio de actividad (logística) con la consiguiente tercerización de lo poco que queda de correos. En logística, con el derrumbe del consumo, “sobran” trabajadores. En la recolección, los contratados han sido despedidos, mientras que ahora van por los efectivos con legajos “sucios”. La nueva concesión es un campo de pruebas para liquidar lo poco que queda de nuestro convenios y beneficios.


Moyano ha renunciado a convocar a una huelga general ante este panorama en todas las actividades. Arrecian las suspensiones y los despidos, pero su meta es “unir” a toda la burocracia sindical y esperar hasta el año que viene, luego de reunirse con el ajustador Macri.


El impuesto al salario está comiendo todo el aumento en paritarias. La insalubridad de nuestras tareas está haciendo estragos entre los compañeros, a punto tal que la ART de Camioneros ha convocado a los delegados para solicitarles que “hablen” con los compañeros para frenar la “andanada” de juicios que tienen. La enorme necesidad de estos compañeros es jubilarse a los 55 años, con el 82 por ciento móvil, ya que se encuentran con una incapacidad del 70 y 80 por ciento, como lo hacen los choferes de camiones. Los adicionales, comida y viáticos no están incorporados al salario. Ante estas severas incapacidades, los compañeros perciben sólo el básico.