La “carpa vir” (virtual) nació como proyecto hace 2 meses, con la idea de instalar un lugar de lucha de la comunidad universitaria puntana, para expresar la bronca frente a las medidas de “ajuste” del gobierno y el temido arancel. Alrededor de la carpa se ha puesto en pie el movimiento estudiantil, con asambleas y actividades permanentes, junto a la gremial docente (Adu) y trabajadores no docentes.

En el curso de este movimiento el Partido Obrero ha iniciado una actividad sistemática en la ciudad, dirigida a apuntalar esta lucha. El movimiento de los universitarios es sintomático: en la provincia supuestamente “bien administrada” y “dormida” se viene un vendaval. El gobierno de Rodríguez Saa prepara sigilosamente el ataque contra los trabajadores provinciales y se hace el otario frente a la cuestión universitaria: con “el recorte que se aproxima está en juego nada más y nada menos que el futuro de la UNSL… cierres definitivos de carreras y despidos masivos” (El Diario, 2/11). Por esto los “radicales” que controlan la UNSL y sus centros estudiantiles, que hasta hace poco discutían un virtual arancelamiento de la universidad, se colocan ahora como “defensores” de la carpa.

El movimiento estudiantil-docente-no docente debe actuar con independencia de las cliques capitalistas que gobiernan la universidad y la provincia, planteando como, lo vienen haciendo el PO y la UJS, un programa de defensa irrestricta de la universidad, contra todo tipo de arancelamiento y por la triplicación del presupuesto educativo. En particular hay que salir al cruce de la maniobra dirigida a quebrar la unidad estudiantil-docente-no docente con la aplicación selectiva al gremio no docente de un subsidio extraordinario gestionado ante el Ministerio de Educación de la Nación por la burocracia de ese gremio. Ese subsidio iría a paliar exclusivamente el recorte sufrido en los salarios del sector, en desmedro de los docentes.

Hay que defender la asamblea conjunta estudiantil-docente-no docente para defender todos los derechos y necesidades de la universidad. Si con una migaja quiebran el movimiento, mañana se largarán por mucho más. Hay que extender la carpa a Villa Mercedes, donde funciona la otra sede de la UNSL, y preparar una lucha a fondo.