Sindicales

1/7/1999|633

Catamarca: La rebelión docente en la encrucijada

En las últimas semanas, por el grado de organización alcanzado por la gran movilización docente, las masivas protestas cruzaron la provincia en todos los sentidos. En consecuencia, el gobierno debió recular y derogar, de conjunto, la legislación del ajuste. Como resultado de un acuerdo entre el gobierno y una intersindical formada por Ateca, Sadop y UDA, se han formado distintas comisiones para analizar problemas calificados como importantes, urgentes y muy urgentes. Entre éstos se cuenta la transformación de los Institutos de Formación Docentes. La Coordinadora de los IES (Institutos de Educación Superior) del Valle Central e Interior, con participación de docentes y alumnos, plantea una negociación separada, para evitar que, de las discusiones entre la Intersindical y el gobierno, surja el planteo de desmantelar carreras, cursos e instituciones enteras.


La desconfianza se entiende a la luz de la historia de los últimos años, cuando varias negociaciones, conciliaciones y concertaciones de diverso pelaje no dejaron ningún resultado positivo y sí una gran desmoralización de la docencia más combativa.


El intento de la Coordinadora de IES —a la cual se ha sumado el Suten, ex lista Celeste en Ateca—, responde a un proceso de radicalización política de un conjunto de docentes y alumnos, que han tendido todo el tiempo a superar la dirección vacilante de la lucha llevada a cabo por la intersindical, cuyo máximo objetivo era sentarse a ‘negociar’, no hacer retroceder al gobierno.


Es posible, entonces, que el ajuste del gobierno intente adquirir una nueva forma, con participación de las ‘partes interesadas’. Esto es, a través del funcionamiento de las Comisiones, y no a un plan de intervención discutido en las Asambleas de Delegados. Al día de hoy, cuando no existe ni un cronograma de pagos de los sueldos del mes de mayo y el gobierno ya ha anunciado que carece de recursos para pagar el aguinaldo, las discusiones se dirigen a resolver a qué sector de la administración pública y específicamente del Ministerio de Educación, se le practicará el recorte.


Nadie ha planteado, salvo la Coordinadora de IES —y esto de modo episódico— que el problema no consiste en repartir los retazos presupuestarios que han dejado 8 años de administración del Frente Cívico, sino la manera de generar recursos en la provincia que ocupa el quinto lugar mundial en extracción de oro, según reza la propaganda oficial. Tampoco se ha hecho el suficiente hincapié en señalar que, mientras sigue planteado el recorte, en el Banco de Catamarca, próximo a su privatización, los capitalistas locales están enjugando sus deudas mediante arreglos extrajudiciales, por mucho menos de la mitad de los montos adeudados.


Extender el debate hacia estos aspectos, que son escamoteados para justificar la carencia de fondos, es tarea de los sectores que han llevado adelante la lucha con mayor energía y en forma consecuente. Es la vía que permitirá superar el planteo gremial, conciliacionista hasta la médula.