Sindicales

4/5/2020

Ciudad de Córdoba: otro ataque sobre el salario de los municipales

Nadie puede decir que el intendente LLaryora actúa de manera improvisada: lleva adelante un ajuste sistemático sobre el salario de los trabajadores municipales. Para ello, primero desconoció la paritaria pendiente; luego, la incorporó mediante sumas no remunerativas. Continuó con el recorte de horas extras y prolongaciones. Ahora, según un audio que trascendió procedente de delegados de las áreas administrativas, se estaría analizando la propuesta de pasar las bonificaciones a sumas no remunerativas para evitar los aportes patronales. El monto del ajuste es variable, según la repartición a la que corresponda, pero el vector es el mismo: destruir el salario municipal.


¿Sobre quiénes recae este ajuste?


Analicemos por partes la propuesta que circula: debería procederse al blanqueo del 3,9% correspondiente a la inflación de diciembre 2019 y discutir una actualización salarial ya que estamos transitando el mes de mayo con una inflación que acumula el 7,6% (aún sin datos para abril), sin que se haya acordado ningún mecanismo de actualización, deteriorando el poder adquisitivo del salario vigente.


Por otra parte, las sumas no remunerativas afectarían bonificaciones y refrigerio en un porcentaje que rondaría entre un 25 (como mínimo) y un 40% del salario en blanco, dependiendo del área. Así, por ejemplo, los docentes perciben bonificación del 20%, mientras que en los sectores administrativos, la bonificación puede alcanzar hasta un 40% y en Desarrollo Urbano, el porcentaje llega al 50%. Esta política de precarización progresiva del salario sigue los pasos del gobernador Schiaretti en la provincia, del mismo signo político del intendente.


Para los trabajadores de las áreas administrativas, el impacto es más fuerte aún, porque continúa el recorte de prolongaciones de jornada y horas extras, que seguirán sin integrar sus salarios.


Sin embargo, el enorme peso de este acuerdo recae una vez más en el sector de los jubilados municipales, dada la correlación entre las sumas que perciben los trabajadores activos y los pasivos y a que nuevamente la caja de jubilaciones será desfinanciada. Los pasivos municipales, además, serán la variable de ajuste por el recorte de más del 10%  que le aplicarán a la mitad de ellos.


La propuesta convalida en los hechos la resolución 397/20 del Ministerio de Trabajo de la Nación, que oficializó el pacto firmado entre la CGT, la UIA, la Came y el Gobierno, admitiendo la rebaja salarial en cuarentena y dando por tierra con la “integralidad del salario” dispuesta en el decreto presidencial original.


En el municipio, mientras ajustan salarios siguen sin tocar los subsidios a los empresarios del transporte, el negociado de la basura, las consultorías y la pauta publicitaria millonaria.


Una salida para enfrentar esta política


La pandemia constituye el escenario para proceder al ajuste general reclamado por las patronales ante la crisis económica y financiera que ya venía mostrando su profundidad, descargando el costo mediante suspensiones, despidos, precarización salarial y recorte jubilatorio, sin que los trabajadores seamos responsables de esta crisis. El salario de los municipales es para Llaryora un blanco apetecible.


Las y los trabajadores municipales ya han intervenido y siguen haciéndolo: trabajadores de la salud, primero, con un proceso de movilización en reclamo de protocolos y medidas de bioseguridad en los establecimientos sanitarios; ahora, las medidas establecidas por directivos y docentes municipales para frenar la arbitrariedad de un ejecutivo que restringe adicionales, afectando seriamente el resguardo de las escuelas y niega actos públicos para cargos vacantes, dejando sin cobertura salarial y obra social a decenas de trabajadores.


El Suoem (sindicato de trabajadores municipales de la Ciudad) tiene que promover y convocar de manera urgente a asambleas de delegados de manera virtual para discutir con el conjunto de los trabajadores medidas para actuar en defensa del salario, de las jubilaciones y de los puestos de trabajo. Nuestro sindicato tiene que recuperar la iniciativa que lo caracterizó de cara a los trabajadores y trazar un camino unificado de lucha contra este ajuste.