Sindicales

6/8/1998|595

Clarín persigue a un delegado

Los vínculos entre los dueños de los grandes medios de comunicación con el poder político y la patronal se han puesto en evidencia una vez más. Al ataque contra los delegados y activistas de Atlántida se suma el que la patronal de Clarín desarrolla contra el delegado Pablo Llonto.


En 1991 Llonto fue expulsado del diario con argumentos falsos. Desde entonces ganó 3 juicios consecutivos por los que, ante los testimonios espurios de la dirección de Clarín, la Sala VII de la Cámara Nacional de Apelaciones de Trabajo ratificó que debía ser reincorporado al diario. Clarín apeló a sus aceitadas relaciones con el menemismo, que por otro lado le han permitido obtener suculentos negociados. El caso cayó en la Corte Suprema, que resolvió a favor de las pretensiones patronales y ordenó a la Sala VII “tomar en cuenta” las razones de la viuda de Noble.


Si bien no hay fecha para que esta orden se cumpla, pende sobre la cabeza de Llonto la amenaza de desafuero, el despido y el pago de las cuantiosas costas que han insumido los tres juicios.


La Naranja de Prensa plantea: cese de las causas, reincorporación de Llonto con sus fueros gremiales al diario Clarín. Por la unificación de las luchas contra las persecuciones a los delegados y activistas.