Sindicales

24/3/2004|843

Comerciantes piqueteros en Moron

La lucha continua

Son las dos de la mañana del 15 de marzo. En la calle, al lado de la camioneta, con los funcionarios municipales se forma la fila de los remises truchos. No ocurre nada; el intendente municipal, Martín Sabbatella, sólo tiene una idea: cómo desalojar a los comerciantes que, atrincherados en sus locales y acompañados por los compañeros del Polo Obrero, impiden el comienzo de las obras para transformar en una plaza la actual terminal, con sus dársenas, donde esperan bajo techo los pasajeros que bajan del tren, con locales comerciales, baños, etc., al módico precio, proyectado, de un millón trecientos mil pesos, que incluye un crédito del Banco Mundial por 380.000 dólares.


El intendente modelo del Wall Street Journal quiere echar a los comerciantes, sin escucharlos ni compensarlos, aun intentando avasallar a lisiados que están en sus locales.


En el cumplimiento del desalojo no importan leyes ni derechos. Eso sí, el 27 de marzo habrá un festival por la memoria, auspiciado por Sabbatella, que se llenará la boca hablando de los derechos humanos.


Reclamamos que se tengan en cuenta los intereses de los comerciantes, que en la obra trabajen los piqueteros que están en la bolsa de trabajo de las organizaciones que hacen el “aguante”, que haya una obra.