Sindicales

19/11/2015|1390

Conciliación obligatoria en Cabot

Los sindicatos y las CGT, mudos, ciegos y sordos


Los trabajadores de Campana y Zárate sufren, desde hace mucho, reiterados ataques a la estabilidad laboral: cierres totales o parciales de químicas, despidos en la papelera Witcel, mil obreros menos en Siderca y siguen las suspensiones. Ahora le tocó el turno a los compañeros de Cabot, nucleados en el Sindicato Unico de Trabajadores del Negro de Humo.


 


El monopolio norteamericano decidió un ajuste “global” en sus 25 plantas, despidiendo a 13 compañeros de la filial argentina. Al conocerse los despidos, el viernes 6, los trabajadores y el sindicato salieron a la huelga indefinida, hasta que fue declarada la conciliación obligatoria que vence el 24 de noviembre.


 


La huelga, ahora suspendida por la conciliación, impactó también en plantas vecinas, en particular en Carboclor, que produce con vapor generado en Cabot y a la vecina Axion, cuyos residuos utilizan ambas.


 


La firmeza y decisión de los trabajadores y su organización en la huelga contrasta con la desidia y el desinterés del resto de los sindicatos y la CGT locales, que no han hecho nada para respaldar a los trabajadores y que dejan hacer a las patronales, que ya “adelantan” el camino del ajuste.