Sindicales

27/11/2003|827

Congreso de Ctera

El Congreso, realizado el 14/11, comenzó a las 14 horas con 111 congresales acreditados y se pasó inmediatamente a la votación, la cual tuvo el rechazo de sólo tres congresales, entre los cuales nos encontrábamos, y tres abstenciones. Lo mismo ocurrió con el balance: dos votos en contra y dos abstenciones. Luego se pasó a discutir un documento sobre política gremial para el período noviembre 2003/2004, que plantea los mismos ejes que la memoria: defensa de las elecciones, porque “permitieron expresar en número la clausura del proceso de resistencia social”; defensa de Lula y Chávez por su carácter antineoliberal; defensa del Mercosur como espacio de integración de los pueblos latinoamericanos. Lo que se agrega a los planteos de la memoria es la caracterización de K, al cual definen como alguien que tiene contradicciones y que “encarna estos nuevos tiempos”. La contradicción consiste en que mientras “traduce demandas de los sectores progresistas, de los DD.HH. y del campo de la militancia social”, por el otro lado firma un acuerdo con el FMI que compromete el 3% de superávit primario para el pago de la deuda externa y el congelamiento de los salarios de los estatales y jubilados de todo el país. Pavada de “contradicción”. Para seguir con las contradicciones (o, mejor dicho, con la política deliberada de la Ctera, de confusión hacia la base), el documento por un lado afirma que el excedente que provoca la retención de las exportaciones y la devaluación fue destinado a los bancos y ahora será para el FMI, pero a la vez se ubica a la espera del rumbo que tomará K con respecto a la distribución de la riqueza.


En cuanto a los ejes de la política gremial de la Ctera, están escritos con la ambigüedad que la caracteriza: “Más presupuesto”, “Recomposición salarial”, “Articular acciones en apoyo a las demandas de las entidades de base”, etc. Cuando intervine planteando la necesidad de definiciones en torno a estos puntos e hice nuestros planteos (triplicación del presupuesto, recomposición salarial de 200 pesos al básico ya, y salario básico nacional igual al costo de la canasta familiar, nadie respondió. También hice críticas con respecto a la defensa del Mercosur, a la caracterización de las elecciones y especialmente de K, y puse énfasis en el grave límite que esto plantea para poder enfrentar su política.


El planteo de un salario nacional lo hicieron varias provincias, pero para diferenciarlo de nuestro planteo lo denominaron piso salarial. Y quedó al desnudo la maniobra para no fijar un monto, cuando planteé que si ese piso era igual al costo de la canasta familiar, yo también lo votaba. Nuevamente hicieron oídos sordos y echaron a andar la máquina de votar: todas las votaciones fueron con 3, 2 y a veces sólo nuestro voto en contra.


Novedades educativas: nos enteramos de que la Ctera se dispone a discutir con el gobierno la modificación de los Estatutos del Docente. Que está realizando acciones para lograr la sanción de una ley nacional de educación que reemplace a la LFE. Que están bregando por la sanción de una ley que permita volver a la jubilación anterior a los que estaban en las Afjp, y varias cosas más.


La conclusión obligada que merece todo esto es que los trabajadores debemos hacer los máximos esfuerzos por recuperar los sindicatos antes de que la burocracia nos entregue atados, y para eso es necesario clarificar acerca del carácter del gobierno de K, las medidas que ha tomado y seguirá tomando en función de cumplir con los organismos internacionales, y la tarea que se nos plantea por delante a fin de evitar mayores desastres en nuestras condiciones de vida y alcanzar lo que los trabajadores necesitan.