El día 4 de octubre, el Hospital Zonal de Esquel y sus Centros de Salud llevaron adelante un contundente paro de 24hs en el marco del paro nacional convocado por ATE. Dicha medida de fuerza se inscribió en un plan de lucha del sector que se remonta a principio de año por la recomposición salarial, el pase a planta y el cumplimiento del convenio colectivo de trabajo.

 

En esta ocasión, al igual que en el paro provincial de estatales del 27 de septiembre, el reclamo de salud coincidió con el de las demás reparticiones que además de pedir la apertura de paritarias del segundo semestre y el pase a planta se pronunciaron en contra de la liquidación de la caja jubilatoria como medida extorsiva para que deba ser aceptada la “armonización”.

 

Todas las reparticiones estatales (salud, obras públicas, bosques, CORFO, auxiliares docentes, etc.) confluyeron en una marcha única en la cual asistieron además representantes del gremio municipal (SOEME) y trabajadores nacionales nucleados en ATE. También se hicieron presentes trabajadores de otras ciudades de la zona que concurrieron facilitados por el acatamiento al paro en sus localidades.

 

El paro se hizo sentir en forma disímil pero presente en el resto de la provincia y con una clara expresión que los trabajadores progresan en su organización en contra de un estado provincial que pretende descargar la crisis en las espaldas de los trabajadores. Quizás la máxima expresión de esta organización creciente sean las reuniones de delegados de todas las reparticiones estatales y la convocatoria desde salud a la conformación de una multisectorial que convoque a todas las reparticiones estatales de la provincia, incluido docentes.

 

Sin respuestas por parte del gobierno provincial, Salud ya se pronunció por el paro y movilización la semana entrante. Habrá que esperar qué deciden los demás sectores. Los trabajadores de la salud saben que es el momento de salir a la calle para evitar el avance privatista sobre el sector, donde el ataque a sus trabajadores se traduce en un plan sistemático de negarle al pueblo trabajador su derecho a la salud. La puesta en marcha de la Cobertura Universal de Salud por el gobierno nacional así lo refleja.