Sindicales

1/8/2022

Córdoba: desplazamiento de Pihen de la CGT, un nuevo capítulo de la interna burocrática

José Pihen, secretario general CGT Córdoba.

El pasado jueves 28, desde la CGT nacional se dispuso la intervención de la CGT regional Córdoba desplazando a José Pihen, secretario general del Sindicato de Empleados Públicos, de la cabeza de la central local.

Estamos ante un nuevo capítulo de una disputa interburocrática por retener el control de la central obrera más importante de la provincia, en momentos en que los destinos del gobierno nacional dependen de su capacidad de mantener los resortes de contención sobre el movimiento obrero para imponer el mazazo que exige el FMI.

De un lado, se encuentra el histórico dirigente peronista, José Pihen, que lleva más de dos décadas a la cabeza de la regional. Proveniente del delasotismo y actual legislador por el PJ, se trata de un hombre que responde al gobierno provincial y ha sabido mantener disciplinado a un sindicato masivo de la provincia, el SEP (Sindicato de Empleados Públicos).

Del otro está la dupla Pablo Chacón, sec. gral. del poderoso gremio de Comercio, y el dirigente metalúrgico Rubén Urbano (UOM). Estos últimos son los promotores locales de la “normalización” y buscan desplazar a Pihen para quedarse con la conducción regional. En esta cruzada cuentan con el apoyo del triunvirato que conduce la CGT nacional: Héctor Daer, Carlos Acuña y Pablo Moyano.

Tras este nuevo intento por desplazar a Pihen están las aspiraciones de la burocracia nacional que responde al riñón del kirchnerismo por tomar la conducción directa de la CGT-regional, en un contexto social y económico explosivo. La intervención y desplazamiento de Pihen bajó como orden directa de Abel Furlán, un hombre del kirchnerismo.

El episodio en la CGT puede aumentar las tensiones entre Schiaretti y el gobierno nacional que, a pesar de su extracción peronista, se encuentra alineado en la variante “antigrieta” que intentan construir a nivel nacional. Aún así, no puede descartarse que el PJ local tenga intereses propios para azuzar la disputa interburocrática, en tanto Chacón es un personaje muy cercano a la senadora Alejandra Vigo, y es por todos conocida la interna entre Pihen y el schiaretismo.

A la lucha por el control político de la central se suman disputas por la caja. Desde la CGT nacional se apunta contra Pihen por una deuda de $3.500.000 (reconocida por la conducción local), proveniente de la Federación de Sindicatos de Empleados Públicos, y otros tantos correspondientes a los gremios de base de la regional que no se encuentran federados. Finalmente, la disputa entre las diferentes fracciones de la burocracia siempre termina en una lucha por la caja.

La resolución notificada por el interventor de la CGT fue rechazada por el espacio liderado por Pihen, quien convocó a un plenario extraordinario para el lunes 1 de agosto. El histórico dirigente cuenta con 72 gremios entre sus aliados y el apoyo de las 62 organizaciones; mientras que Urbano y Cachón gozan de la venia nacional. Incluso las intenciones declaradas de Luz y Fuerza y Surbac (Recolectores de Residuos) de reincorporarse a la CGT regional Córdoba podrían jugar a su favor.

Necesitamos un paro activo y plan de lucha

Las disputas por el control de la CGT local lejos están de responder a las tareas de la clase obrera, que enfrenta golpe tras golpe de todo el arco patronal. El nuevo cambio de gabinete que colocó como superministro a Massa solo viene a confirmar el rumbo ajustador y antiobrero del gobierno de los Fernández. Sin embargo, la CGT se empeña en explicar que la marcha del 17 de agosto es para acompañar las políticas del gobierno, y contra los formadores de precios.

En sintonía con la CGT nacional, la conducción de Pihen ha sido la punta de lanza para permitir el avance del gobierno provincial en el recorte salarial. Su rol fue decisivo a la hora de hacer pasar la aprobación de la reforma jubilatoria antiobrera de Schiaretti en 2020. En la misma línea se inscriben las conducciones de Chacón y Urbano.

La intervención de la CGT regional Córdoba no viene a reorientar el rol colaboracionista de las burocracias con el ajuste, pero sí es la expresión de una profunda descomposición de estas conducciones enquistadas hace décadas en las organizaciones obreras.

Las y los trabajadores necesitamos intervenir de manera decidida, unificada e independiente en la crisis. Para ello, reclamamos un paro activo y plan de lucha nacional, preparado con un plenario de trabajadores ocupados y desocupados que potencie las emergentes luchas obreras con el desarrollo del movimiento piquetero independiente, en pie de lucha hace varios meses.

En este sentido se encuentra el V Plenario Nacional de la Coordinadora Sindical Clasista que tendrá lugar el próximo 6 de agosto. Será, sin duda, un centro de resonancia de las principales luchas obreras, y un espacio para organizar y fortalecer a las agrupaciones clasistas y de lucha llamadas a desplazar a esta burocracia descompuesta de las organizaciones obreras.

Con esta perspectiva, en Córdoba, nos preparamos para poner en pie un importante Plenario provincial de trabajadores ocupados y desocupados para fines de agosto, convocando a las organizaciones piqueteras independientes, ATE, Sitram (Municipales de Jesús María), Sutna y los sindicatos y el activismo en lucha.