El secretario de Trasporte de la provincia de Córdoba, Franco Mogeta, salió a anunciar que hay un principio de acuerdo entre empresarios, la conducción del gremio y el gobierno para que vuelvan a circular los colectivos. El servicio volvería el jueves 4 de junio, una vez que las patronales depositen en las cuentas sueldos un porcentaje del salario acordado.

Franco Mogeta, además de anunciar el acuerdo que terminaría con las medidas de fuerza, fue más lejos al decir que “trabajaremos en las distintas alternativas para modificar el diseño del sistema actual que conocemos”. En efecto, la reanudación del transporte ya arranca con un ajuste sobre los trabajadores, mientras que respecto a las patronales, que entre otras faltas realizaron retención de sueldos, se analizará el “comportamiento a seguir”.

La conducción del gremio se dispone a aceptar la propuesta acercada por los empresarios que consiste en el pago integral del sueldo de marzo y un 75% en concepto de “prestación no remunerativa” de los meses de los sueldos de abril y mayo. Además, el salario de los dos meses mencionados se abonaría en 2 y hasta 3 cuotas, dependiendo de si las empresas ofrecen un servicio mixto o puro. También se acordó la imposibilidad de despedir por el curso de seis meses

El gobierno provincial, a lo largo de estos meses de párate en el trasporte, siguió cumpliendo sus compromisos sin que por ellos las empresas paguen el salario adeudado. De esta manera, mientras las empresas seguían recibiendo dinero con los colectivos parados, las familias de trabajadores tenían que subsistir con un porcentaje menor del salario, en plena cuarentena

Así las cosas, el contrapunto entre unos y otros es otra expresión de la connivencia entra los capitalistas del transporte y quienes gobiernan. Cabe recordar que el servicio de transporte inter urbano, y urbano en varias ciudades del interior, se encuentra parado desde hace 49 días. En todo este tiempo, la sucesión de hechos da cuenta que el nuevo diseño del sistema de trasporte que pergeñan capitalistas y el gobierno, con el concurso de la burocracia sindical, tiene como eje un mayor ataque a las condiciones de trabajo.

La oposición patronal en ningún momento esbozó la más mínima medida contras la extorsión de las empresas que tienen a trabajadores y usuarios de rehenes a la espera de más subsidios. Solo el Frente de Izquierda presentó en la Legislatura una salida desde el campo de las y los trabajadores, planteando la estatización del servicio bajo control obrero y de usuarios.

El conjunto de trabajadores del trasporte interurbano debe sacar las conclusiones, toda vez que las patronales pretenden sostener los recortes en los haberes. Además, la explosiva situación de la economía también pone en crisis un sistema sostenido por subsidios estatales. La salida a la crisis del sistema de trasporte pasa por estatizar el sistema. Terminando con el costo empresario, se garantizan los derechos laborales, y del pueblo trabajador. Que la crisis la paguen los capitalistas.