Finalmente, y tras una gran presión de los trabajadores mercantiles, la patronal de A Granel S.A. cerrará las puertas de todas sus sucursales en Córdoba por el lapso de 48 horas (martes 19 y miércoles 20) para la realización de tests masivos a todos los empleados, luego de numerosos casos confirmados de coronavirus en aquellas.

Mientras que el presidente de la empresa buscaba ocultar su responsabilidad en la exposición de los trabajadores, sosteniendo que “no sabemos cómo sucedieron los contagios”, la gran presión de los trabajadores -desde adentro de los puestos de trabajo y con diferentes llamadas a los organismos de Estado provincial-  logró que tanto la cúpula directiva del comercio como el Centro de Operaciones de Emergencia dieran el brazo a torcer y se pudieran realizar los hisopados.

Esto se da en un contexto de intriga en las seis sucursales de la capital cordobesa y las dos del interior provincial (Malagueño y La Calera). En estas últimas, quienes se hicieron el test correspondiente los días domingo y lunes deberán hacérselo de nuevo, algo frente a lo cual desde la empresa “todavía no dieron las explicaciones correspondientes”, según el relato de los trabajadores.

El cierre y los test significan un triunfo de la organización de quienes tenemos la fuerza de trabajo.

La clase obrera debe ponerse en pie de lucha, creando comisiones de seguridad e higiene en todos los puestos de trabajo y exigiendo los elementos de seguridad correspondientes y test masivos efectivos a todos los trabajadores de comercio. Así como la prohibición real de despidos y suspensiones por un año y el aumento del salario mínimo al valor de la canasta básica familiar. Que la crisis la paguen las patronales.