Sindicales

16/10/2020

Córdoba: operadores de call centers marcharon al Ministerio de Trabajo

La autoconvocatoria de trabajadores reclamó por condiciones laborales y denunció al gobierno y su conducción gremial.

Un contingente de jóvenes trabajadores de call centers de Córdoba se movilizó este jueves 15 al Ministerio de Trabajo para denunciar las pésimas condiciones laborales que arrastran hace mucho tiempo y que se han agravado con la pandemia.

Los trabajadores han puesto en el blanco de sus protestas no solo a las patronales sino también al gobierno y a la burocracia sindical de la Asociación de Trabajadores Argentinos de Centros de Contactos de Córdoba (Attac), lo que da cuenta de una maduración en la comprensión de los objetivos ajustadores de este tridente del Pacto Social, y que por medio de la acción directa ya se orientan a quebrarlo.

La marcha empezó con una concentración frente a Patio Olmos a las 9:30 horas, para luego dirigirse hasta la cartera laboral. La alerta de inclemencia climática no desanimó a este sector que carga sobre sí niveles de explotación esclavizantes, empujado por ellos a intervenir con resolución y energía notables. Esta fuerza de los y las trabajadoras de los calls fue acompañada por organizaciones gremiales y políticas que también prestaron su solidaria presencia.

La agrupación de Operadorxs de Centros de Contacto Unidxs (Occu) realizó una presentación en el Ministerio de Trabajo por intermedio del abogado Jorge Navarro, donde se detallan los reclamos centrales de los trabajadores de calls. Con una reunión la semana pasada, Occu se plantea delinear los ejes programáticos que serán punta de lanza para las futuras luchas: por un aumento salarial del 60%; basta de despidos y suspensiones; adicional por teletrabajo; basta de precarización laboral; libertad sindical y fin de las persecuciones.

 

 

La Atacc, conducida por Walter Franzone, es repudiada ampliamente por todas las bases del gremio. El burócrata entreguista viene aceptando y pactando con su complacencia el peso de los ajustes salariales, junto a las patronales que se nuclean en la Cámara de Centros de Contacto. Empresas de capitales colosales que, sin embargo, no han tenido empacho en ofrecer únicamente un adelanto de 3.000 pesos en el marco de la paritaria, a trabajadores esenciales.

Al mismo tiempo, al calor de las autoconvocatorias que crecen frenéticamente en las redes sociales y salen cada semana a tomar las calles, estas empresas están procediendo a despedir extorsivamente al personal como modo de presión. Sobre este reclamo, por supuesto, no toma parte alguna la conducción de Atacc, e incluso está involucrada en despidos injustificados dentro del propio sindicato. Así lo afirmó un compañero al tomar la palabra en el final de la marcha, contando su aberrante caso: haber sido despedido en forma discriminatoria por ser homosexual, junto a otro compañero que salió en su defensa en aquel momento.

Con esta conducción burocrática y sinvergüenza de Atacc se perpetúan los agravios hacia las y los trabajadores de call centers que son esenciales para la sociedad en un contexto de pandemia. Es crucial avanzar en la perspectiva del frente único de lucha dentro de los lugares de trabajo, que lleve a este enérgico movimiento a barrer la dirección del gremio y avanzar en su recuperación, para implantar un modelo democrático y combativo frente a los nuevos ataques que se pretenderán descargar con la crisis abierta.