Las camareras autoconvocadas del PaiCor (servicio alimentario de las escuelas), trabajadoras de distintas empresas y establecimientos escolares, cortaron por varias horas la avenida frente a Casa de Gobierno, el pasado lunes 22. Reclaman que quieren trabajar y cobrar sus salarios que desde diciembre del año pasado les adeudan. También reclaman por la vuelta de las viandas calientes a las escuelas.

“Somos alrededor de 4.000 trabajadoras que desde marzo de 2020, al comienzo de la pandemia, hemos sido suspendidas y cobramos el 50% del sueldo, que aproximadamente en las distintas escalas salariales son entre $7.000 y $5.000 (…) Muchas han perdido su hogar que alquilan (son sostén de familia con niños) quedando en la calle, ante lo que hicimos colectas para ayudarlas”, denuncia una de las trabajadoras, mostrando la situación de total desamparo en la que han quedado.

En 2021, con el intento del gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, de volver las clases a la presencialidad, “nos han dicho que las viandas no vuelven” y aclara que “nosotras tenemos un protocolo que lo hemos presentado al COE (Centro de Operaciones de Emergencia) y las distintas autoridades provinciales y nadie nos dio respuesta”. Las trabajadoras exigen que vuelvan las viandas calientes que se entregaban a los padres al comienzo de la pandemia. Estas viandas fueron cortadas por el gobierno para otorgar módulos escolares (bolsones), que son entregados por el personal de limpieza, recargando tareas a estas trabajadoras mientras otras quedan en la calle.

Desde el gobierno les responden que las viandas no vuelven, como mínimo, hasta julio, quitando el Paicor a las y los alumnos en un momento en que más lo necesitan, con el agravamiento de la desocupación, el hambre y la miseria en las familias obreras.

Sobre el rol que juega la conducción del sindicato (Uthgra), la trabajadora agrega: “En ningún momento el sindicato nos apoyó. Ellos mantuvieron convenios para abajo y dijeron que hicieron presentaciones por nuestra situación, que averiguamos y nunca hicieron. Ellos arreglan para su propio bolsillo y ahora nos mandaron a gente infiltrada para fotografiar y grabarnos. Una vergüenza”.

Desde la Coordinadora Sindical Clasista nos hicimos presentes acompañando a las compañeras y dándole todo el apoyo y solidaridad para que se hagan efectivos sus reclamos. A la vez que denunciamos al gobierno provincial ajustador, que avanza con la precarización y tercerización de las tareas dentro del Estado, llevando la educación pública a una situación de emergencia.

La lucha de docentes, estudiantes, auxiliares, familias y comunidad la educativa es necesaria para dar una respuesta a la crisis educativa que el gobierno ha profundizado. Invitamos a las compañeras del PaiCor y al resto de las a participar del Plenario Educativo del sábado 27 para debatir un programa y plan de acción del conjunto de la comunidad educativa contra las políticas privatistas.