Sindicales

20/7/1988|234

Despiden trabajadores en el Mercado Central

Tres trabajadores de la nave 12 del Mercado Central han sido despedidos. El patrón, uno de los puesteros concesionarios del Mercado, decidió transferir la concesión y para ello lo hizo sin cargas. Echó a los trabajadores sin preaviso, ni indemnización alguna.

Cuando estos recurrieron al Sindicato, el STIMPHRA, éste se negó a asumir su defensa, alegando que estaban fuera del gremio debido a que la patronal hace 3 meses que no aporta las cuotas sindicales que les retenía.

Diversos trabajadores adheridos al STIMPHRA están organizando, la firma de un petitorio para que el sindicato convoque a una Asamblea General y encare la defensa de los despedidos.

Hace unas semanas los patrones puesteros organizaron una movilización y una serie de “paros” en los que arrastraron a gran parte de los 3000 trabajadores del Mercado Central. Reclamaban que se cerraran otros mercados existentes en el conurbano en defensa de la monopolización en el Mercado Central de la intermediación de la venta de frutas y hortalizas. Lógicamente, eliminar la competencia les permitirá a estos patrones aumentar sus ganancias en detrimento de los pequeños minoristas y del trabajador-consumidor. Para arrastrar a sus trabajadores detrás de este proyecto, los patrones decían que lo hacían en defensa de la fuente de trabajo. Los sindicatos de los trabajadores del Mercado Central apoyaron estas movilizaciones patronales o tuvieron una actitud de neutralidad benevolente. Hubo corrientes de izquierda (como el Mas), que plantearon que estaban en el mismo barco los patrones y los trabajadores, en una reedición de la teoría de la conciliación de clases. Pero no pasaron unos pocos días para que los patrones volvieran a la carga contra sus trabajadores. Más que nunca se impone la organización independiente de los trabajadores de Mercado Central. Una Asamblea de STIMPHRA debe no sólo discutir la lucha por la reincorporación de los 3 despedidos, sino también el reclamo de un aumento salarial y la indexación mensual del salario de acuerdo con el costo de vida. Y extender su reclamo al de los otros trabajadores del Central, particularmente los changarines que no están organizados, ni tienen ningún tipo de protección social, sometidos a las arbitrariedades del patrón de turno.