El miércoles 3/5 delegaciones de la Multicolor se movilizarán al Ministerio de Trabajo -donde están convocados los gremios docentes- para reclamar la reapertura de la paritaria y el aumento de los salarios ajustados por inflación. Para la semana siguiente está prevista una gran marcha a La Plata donde tiene su asiento la Dirección General de Escuelas. Como parte del plan de lucha se impulsarán asambleas y mandatos de lucha en defensa del salario y la educación pública.

Este plan de acción sale al cruce de la pulverización de los salarios pero es también una respuesta combativa a las provocaciones del gobernador Kicillof y su ministro de Educación Alberto Sileoni, quienes por primera vez en años anunciaron que van a aplicar falta injustificada a las decenas de miles de huelguistas que pararon con la Multicolor.

La “mileiteada” de Kicillof

Las amenazas de la Dirección de Escuelas bonaerense está echando más leña al fuego. En algunas seccionales se está imponiendo que se consigne paro y no falta injustificada, en una lucha que recién comienza y que la Multicolor debe abordar con la máxima energía. La Multicolor se ha convertido en el canal de la protesta organizada por el aumento salarial, pasando por encima de las direcciones carneras del Suteba y del Frente de Unidad Docente Bonaerense (Fudb).

El exabrupto de Roberto Baradel cuando afirmó en el congreso anual del sindicato que “ustedes (por la Multicolor) tienen los paros y nosotros los sindicatos” vuelve a manifestarse como realidad y advertencia. El cumplimiento masivo del paro desautorizó a la burocracia y abre las puertas para un trabajo a mayor escala por la recuperación de los sindicatos.

El paro impactó en la base celeste

Esta tendencia ascendente se verifica en el lugar relevante que viene ocupando la Multicolor como referencia provincial y también en las autoconvocatorias docentes, como ocurriera recientemente en La Matanza donde cientos de jardineras coparon el Suteba celeste al grito de “qué se vayan”, por la inacción cómplice ante las falsas denuncias.

Las 48 horas del paro arrastraron a un amplio sector de la propia base celeste, incluidos delegados promovidos por la burocracia del Suteba. Esto explica la altísima adhesión en distritos conducidos por el baradelismo. En La Plata y Ensenada pararon el 80 y 100% de la docencia, un fenómeno que se manifestó en todos los distritos y que le dio un tono estratégico al paro multicolor. Que haya parado una franja de la base celeste es inseparable del fracaso del gobierno del Frente de Todos y del rechazo que provoca la candidatura de Sergio Massa, un hombre del FMI.

Si la base celeste se sumó al paro es porque la paritaria firmada en febrero resultó ser una estafa. Tan fuera de la realidad como “el normal inicio del ciclo lectivo” anunciado por Kicillof y la conducción celeste, o aquella otra frase del secretario general del Suteba y adjunto de la CTA Yasky, Roberto Baradel, cuando se jactó de que el mejor plan de lucha consistía en apoyar la reelección de Kicillof.

El paro puso al rojo vivo la lucha por la independencia del Suteba frente a una burocracia integrada orgánicamente al gobierno, a la Dirección de Escuelas, al Ministerio de Trabajo y a los distintos estamentos de gestión educativa.

La centralidad del salario

La lucha por la reapertura de las paritarias le cae al cuello del ajuste fondomonetarista en la provincia de Buenos Aires. La agitación salarial de la Multicolor oficia como combustible del plan de lucha. Horas antes de que comenzaran las 48 horas de paro, el ministro de Trabajo bonaerense convocó a docentes y estatales a una reunión “paritaria” para el miércoles 3 de mayo en La Plata: el gobierno sabía de sobra que el paro iba a ser masivo y combinó la zanahoria de la “paritaria” con el ataque a la huelga, tildándola de ilegal. La jugada fue un boomerang para Baradel y compañía, y terminó radicalizando el paro provincial.

En un comunicado, el Fudb -que nuclea a las burocracias sindicales docentes- anunció que va a pedir que se ejecute la “cláusula de actualización salarial de la paritaria”. Esta forma escurridiza confirma que la paritaria de febrero pasó a mejor vida como resultado del 100% de inflación proyectada y la devaluación en marcha. Con la “actualización” – que no es automática- la burocracia esconde cuál es el reclamo concreto y concurre una vez más a la paritaria sin mandato. El salario igual a la canasta familiar, y por lo tanto de un piso que no puede ser inferior a los $200.000 que cuestan los bienes de la canasta familiar, encabeza las reivindicaciones de la masa docente.

Plan de Acción

El ataque al derecho de huelga es Bullrich y Milei en estado puro y funcional a la campaña de Juntos y los “libertarios” por la reglamentación y liquidación del derecho de huelga docente. Es el kirchnerismo el que se pliega a la agenda de la derecha y la ejecuta para salvar el ajuste. La solicitada de la CTA “de los trabajadores” (Yasky) llamando a “frenar la desestabilización” mientras ataca las huelgas docentes es el mascarón de proa de su apoyo al plan fondomonetarista.

La Multicolor de La Plata, Berisso y Ensenada se movilizarán masivamente al Ministerio de Trabajo el 3 de mayo. Allí se levantará una tribuna y se realizará una asamblea para impulsar los mandatos por escuela y la movilización de toda la Multicolor a la ciudad capital de la provincia.

La defensa del salario y de la educación pública delimita aguas con Kicillof y también con toda la derecha privatista que manijea la privatización como “salida” a la crisis educativa. Vamos a la continuidad del plan de lucha por un salario no inferior a los $200.000 por cargo y asambleas por escuela para confeccionar los mandatos a la reunión de coordinación Multicolor. Fuera el FMI y fuera la burocracia cómplice.