Sindicales

13/4/2021

Docentes CABA: miércoles 14 jornada de paro

Vamos al paro para defender la salud y la educación.

Secretaria gremial Ademys

El miércoles 14, en la Ciudad de Buenos Aires, habrá nuevamente paro y protesta de la docencia contra el gobierno de CABA y de Nación, reclamando medidas de emergencia y de asistencia, dado el grave cuadro epidemiológico que se vive en la ciudad y en el país, con el reclamo de suspensión de actividades escolares presenciales, garantía de computadoras y conectividad, vacunación para todxs, asistencia a familias y desocupados de $30.000.

Ademys viene de parar por el fallecimiento por Covid-19 de Jorge Langone, de la técnica 13 del barrio de Lugano, que fue un punto de inflexión para la comunidad educativa. A lo que se sumó semanas después el fallecimiento de un auxiliar.

La medida del 14 viene precedida de una serie de medidas de paros, como el no inicio de clases de 72 horas, los siguientes paros del 1 de marzo con las seccionales multicolores del país y el del 8 de marzo, las consultas en las escuelas y las asambleas abiertas, que empalman con una serie de reclamos que viene realizando el sindicato, impulsando la necesaria intervención del conjunto de lxs trabajadorxs en la crisis bajo la pandemia, ante una Ctera-UTE (sindicato docente) completamente paralizada por su integración al gobierno de Fernández.

Ahora, con la segunda ola encima, con subida de casos y advertencias de los especialistas sobre el impacto dentro del sistema de salud, la inviabilidad de mantener actividades no esenciales abiertas, con transporte público desbordado, sin vacunación masiva para todxs y escuelas con burbujas continuamente aisladas y en riesgo, se pone de manifiesto que el gobierno ha fracasado una y otra vez en el manejo de la pandemia, ya que privilegia el negocio privado de los laboratorios que producen vacunas en Argentina y se la llevan afuera y sigue la hoja de ruta del FMI, aplicando un ajuste histórico.

En las escuelas, en las fábricas y en el transporte nos contagiamos

A pesar de lo que dicen el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, o la propia ministra de Salud, Carla Vizzotti, los lugares de trabajo y estudio son lugares de contagio, justamente por la falta de condiciones epidemiológicas, de infraestructura, de protocolos, sin vacunación ni política de testeo masivos, en un marco de crecimiento de casos.

Si seguimos los índices que recomienda el centro de control de enfermedades que se aplica en EE.UU. y en otros países para establecer cuándo una actividad como la escolar es compatible con la situación epidemiológica, que es un parámetro objetivo, aunque no suficiente, CABA siempre se pasó de los 200 casos promedio acumulado en 14 días cada 100.000 habitantes. Lo que en febrero y marzo daba 220 ahora arroja 1.000, y el pronóstico es que se eleve aún más.

Esa es la razón por la cual se flexibiliza el denominado semáforo epidemiológico firmado por el Consejo Federal de Educación en agosto del 2020. Es decir que el gobierno se propuso manipular los datos para que sean compatibles con aperturas, en línea con la orientación más general de presentar la “nueva normalidad”, que tantos empresarios y asociaciones patronales pedían.

Esta política fue presentada falsamente como la defensa de la presencialidad escolar masiva, cuando son los gobiernos los que atacan sistemáticamente la educación, recortando los presupuestos, cerrando escuelas, aplicando reformas antieducativas. No garantizan ni la virtualidad, ni la presencialidad. Es lo que puso en evidencia la masiva movilización de la juventud piquetera que ocupó el Ministerio de Educación de Trotta reclamando las computadoras, la conectividad y las becas para poder estudiar.

El jefe de Gobierno de la Ciudad, Rodríguez Larreta, y la ministra Soledad Acuña vienen de recortar el presupuesto educativo, en particular el rubro de infraestructura escolar y el plan de distribución de computadoras y conectividad.

La prioridad en el transporte no existe, porque supone colocar un transporte especial para el cual no destinaron un solo peso, dado que la comunidad educativa mueve alrededor de 1,2 millón de personas diariamente. Y las “burbujas” son cerradas preventivamente por casos sospechosos, estrechos o positivos todos los días, no sin resistencia, dado que la orientación del Ministerio de Educación es no aplicar el ya deficiente protocolo hecho a la medida del gobierno.

Hace décadas que la escuela pública se sostiene gracias a las luchas educativas, que defienden los presupuestos, los programas educativos, los salarios docentes, etc.

Sin condiciones adecuadas, tal como lo señalamos una y otra vez, los gobiernos son responsables del riesgo y la exposición a los que nos someten y por eso llamamos nuevamente al paro y a la acción en las escuelas.

¿Y las vacunas?

La expectativa sobre la vacunación de la docencia y de toda la población era enorme. Y no es para menos, dado que la única forma que se conoce hasta el momento, en el Aspo/Dispo, para combatir el virus del Covid es mantener la distancia social, el uso del barbijo, la higiene y la vacunación de la población.

El gobierno cada día festeja el “puchito” de vacunas que sobran de los países imperialistas, que tienen acaparado el 90% de las dosis que se han fabricado, mientras aún no ha sido vacunada la población de riesgo. Tiene a su mano intervenir los laboratorios que producen el principio activo de la vacuna que se comercializa, como Astrazeneca, propiedad del empresario amigo del gobierno Sigman, que incluso ha incumplido la entrega de al menos 22 millones de dosis, y ni siquiera avanza en dicha medida.

La Ctera no ha reclamado por el sector, ni hacen nada para lograrlo.

La realidad es que al día de hoy solo el 30% de la docencia está vacunada, según información oficial. En Caba solo se inocularon con una dosis a 16.000 docentes de 111.000 y se ha interrumpido el calendario, debido a la crisis de falta de vacunas a la que ya nos hemos referido en especial en una nota previa.

Cobra fuerza entonces, tal como se ha votado en las asambleas docentes, el planteo del Frente de Izquierda Unidad de la intervención y declaración de utilidad pública del laboratorio ubicado en Garín para la vacunación popular. Reclamo que está integrado en la base del paro del miércoles 14.

Con un programa integral de reclamo hacia el Estado, tanto al gobierno de Larreta como al de Fernández, llamamos a parar y protestar con una jornada de caravana de autos y bicicletas, que es una forma de poder mantener cuidados de distancia social, de Congreso al palacio Pizzurno a las 12 hs, junto a los sutebas multicolores. La UTE-CTERA y otros han tenido que plegarse a la convocatoria de paro, tras reclamos de las escuelas, de la lista multicolor de UTE, que no puede quedar ahí. Es necesario que rompan su integración al gobierno, para imponer todos los reclamos de la docencia y del conjunto de la comunidad educativa, dando continuidad al plan de luchas.