Sindicales

20/2/2023

Docentes-Chubut: paritarias a la baja para garantizar el pago de la deuda

Necesitamos con urgencia un Plenario Provincial de Delegados para votar un plan de lucha.

Delegada escolar de Atech

Mariano Arcioni, gobernador de Chubut, junto a Sergio Massa

La docencia chubutense continúa con su pérdida de poder adquisitivo, luego de casi dos años de congelamiento salarial durante 2020 y 2021, gracias a la entrega de la conducción Celeste en la Atech, en un claro guiño a la gobernabilidad de Fernández, pero también del mandatario provincial Mariano Arcioni.

Durante 2022, la conducción Lila en la Atech presentó una constante falta de organización de las bases docentes, debido a su inclusión dentro del campo político pejotista, algo ya denunciado por Tribuna Docente. De esta manera, la docencia soportó el descargo de la crisis sobre sus espaldas, con paritarias a la baja y por decreto, con un 65%, contra una inflación de casi 100%. A fin de 2022, el gobierno decidió retirar el bono extraordinario y hubo una rebaja salarial de hasta $8.000. En un cuadro de ajuste nacional a pedido del FMI, Arcioni sube la vara ofreciendo un techo paritario de 38% para todos los estatales en 2023 -cuando en otras provincias, un 60% es un escándalo de miseria-, considerando que el delfín de Massa en la Patagonia proyectó un 34% de inflación en el presupuesto actual, al que le recortó un 60% de fondos para Educación.

Ajuste

Los ingresos a la provincia estarán por encima del 30%, considerando las regalías petroleras, los fondos de coparticipación y los impuestos propios. Sin embargo, Arcioni ataca al conjunto de la mayoría estatal con el anuncio del acuerdo del 38% cuotificado y no acumulable –en enero-, ya anticipando que ese sería el monto a “negociar” con la docencia. Si bien las direcciones sindicales burocráticas han hecho su colaboración necesaria para bancar el ajuste, también lo han hecho participando de reuniones por fuera de lo regulado legalmente, o avalando la homologación de acuerdos que van en contra de los intereses de la docencia por representar un ataque directo a los trabajadores y sus derechos.

Arcioni logró un refinanciamiento de la deuda (de la “pesada herencia” de su compañero de fórmula Das Neves), gracias a la alianza estratégica con Sergio Massa, negociando cuatro desembolsos anuales de UD 30.5 millones -uno ya fue hecho en enero. Y es de suma prioridad que continúen los lineamientos de la agenda fondomonetarista. Arcioni ha sido un aliado estratégico para Macri, como lo es para Fernández, garantizando el recorte necesario en las arcas públicas, el congelamiento salarial, el incremento en la deuda con el Instituto de Seguridad Social – ISSYS, generando desde 2017 a la fecha un incremento de casi 1.000% y ante la latente amenaza de una posible armonización de la caja-, y las diferentes maniobras para entregar los bienes comunes de la provincia a los capitales extractivistas (el Chubutazo Antiminero logró, tras siete días de represión y movilizaciones populares, que caiga la Ley de Zonificación minera en 2021).

La última estrategia es la de la judicialización, criminalizando la protesta social y llevando adelante instancias judiciales a compañeros que partiparon del Chubutazo Antiminero. ¡Luchar no es delito!

La Lila se encuentra con su propia contradicción: la grieta con la Celeste se achica al compartir el mismo campo político. En las próximas elecciones municipales de Trelew, hay una alianza programática: el Chusoto (Arcioni), el Frente de Todos (Celeste) y el PTP (Lila) comparten el objetivo político, colocando candidatos referentes de cada espacio en la misma boleta. ¿Cómo van a organizar a la docencia en contra de sus propios aliados políticos? Imposible.

Un Plenario Provincial de Delegados con un plan de lucha

En mayo de 2022, la Lila convocó a un Plenario Provincial de Delegados, que tuvo dos características centrales que jugaron a favor de la obturación posterior: la primera es que la Celeste lo vació –sólo hubo dos representantes- y la segunda es que las resoluciones debieron ser ratificadas por el Consejo Directivo. De esta manera, el plan de lucha votado a largo plazo, con paros progresivos, fue totalmente desarticulado.

Amet, UDA, Sadop y Sitraed hoy aceptan la única propuesta de 38% no acumulable. Con un básico testigo de $50.056 llegaría a $56.056 (12%, la cuota más alta), cuando la inflación de enero ya consumió la mitad de ese porcentaje. Así, con la firma de este acuerdo, en agosto, un docente inicial percibiría unos miserables $146.660, y la canasta familiar de diciembre fue valuada en $152.000. ¡Ningún docente bajo la línea de la pobreza!

Urge la convocatoria a un Plenario Provincial de Delegados, para poder votar un plan de lucha que articule el pliego de reclamos de la docencia; no sólo luchamos por la recomposición salarial sino también por la defensa irrestricta de nuestro estatuto docente, por condiciones de seguridad e higiene para los edificios escolares y construcciones nuevas, para poder generar más puestos laborales y evitar la sobrecarga laboral en las aulas, y contra la imposición de la 5ta hora (en muchos casos no cobrada) sin un plan real de proyección pedagógica-educativa. ¡Vamos por un no inicio y un plan de lucha ya! Jorgelina y María Cristina, presentes.