Sindicales

28/1/2020

Docentes Santa Fe: Perotti anula la cláusula gatillo, Sonia Alesso acompaña

El pasado 21/1, el gobierno provincial comunicó a partir de voceros y ministros la anulación de la cláusula gatillo para docentes, estatales y jubilados, y un aumento por decreto de un 4,1% a cuenta de la próxima paritaria. En ese cuadro, Sonia Alesso (secretaria general de Amsafe Provincial y de CTERA) en lugar de pronunciarse en contra de esta medida y convocar a la docencia a luchar para defender el salario, no dudó en desprestigiar a la cláusula gatillo sirviendo de apoyo el propio gobierno.  Ante los medios, Alesso cuestionó la utilidad de la cláusula gatillo ya que "no era la panacea” y que no se podía discutir "cláusula sí o cláusula no” (La Capital, 22/01), lo que da cuenta de su disposición a entregar esta herramienta gremial -que aún con déficit- compensa el salario frente a la inflación. 


Como si fuera poco, a través de un comunicado de Amsafe Provincial, anunciaba que “el gobierno otorga el aumento correspondiente a la actualización por inflación del mes de noviembre”, ocultando que es un aumento por suma fija por decreto a cuentas de la próxima paritaria, que implica la eliminación de la cláusula y que tampoco cubre lo que correspondería por cláusula gatillo, ya que les van a adeudar un 3,8% correspondiente a la inflación del mes de diciembre. Una caradurez propia de la burocracia que acompaña al gobierno en su política de ajuste. Este accionar contrasta con Amsafe Rosario, que inmediatamente rechazó estas declaraciones, exigiendo paritarias libres sin condicionamientos  y advirtió de la maniobra de la deuda del 3,8% del mes de diciembre y del acompañamiento de la dirección provincial.


Jorge Hoffmann, secretario general ATE Santa Fe, no dudó en reconocer la paritaria como ámbito de discusión y negociación para luego sentenciar que la cláusula “es un elemento más, que tuvo buena prensa pero no empató la inflación” (El Ciudadano, 22/01). Hoffmann, un entregador serial del salario de los estatales, ataca la cláusula gatillo, y anticipa que no pretende luchar para que los salarios no sigan perdiendo frente a la inflación. Ni hablemos de una recomposición salarial, cuando la mayoría de los estatales está por debajo de la línea de pobreza.


Este accionar de la burocracia sindical le calza como anillo al dedo al gobierno. De hecho, el propio ministro de Gestión Pública, Rúben Michlig, buscó apoyarse en la burocracia al sentenciar “algunos gremios ya están reconociendo que la cláusula gatillo es como una trampa porque llega un momento en que encorseta la negociación”.


Que la deuda y la crisis, la paguen los capitalistas


Sucede que el gobierno ha tomado esta medida de ajuste luego de argumentar que es “para hacer frente al pago de deudas de contratistas, proveedores y volver a constituir el Fondo Unificado de Cuentas Oficiales (FUCO)”. Sin embargo, vienen de aprobar una reforma tributaria que mantiene prácticamente intactos los intereses de los grandes grupos agroexportadores, industriales y sojeros de la provincia.


Por lo tanto, ¿quiénes son los que pagarán la deuda? Parece que serán los trabajadores al resignar la indexación de su salario. Hay que ser muy claros, un aumento de suma fija se licua con la inflación y devaluación. Perotti no hace otra cosa que aplicar la política de Alberto Fernández: la llamada “desindexación de la economía”, que no es más que atar el salario de acuerdo al gasto del Estado y a lo recaudado, desconociendo la inflación. Para ello se pretende eliminar cláusulas gatillo (como hizo el gobierno de Manzur en Tucumán), otorgar aumentos por decreto a cuenta de acuerdos posteriores que consolidan salarios de miseria y socavar las negociaciones paritarias. La pelea entonces es porque la crisis en la que está sumergida la provincia y las deudas que la agobian la paguen los grandes grupos capitalistas que son quienes nos han arrastrado a esta situación, y no los trabajadores.


Es urgente la deliberación y un plan de lucha


El pasado 2 de enero, cuando el gobierno había anunciado el pago extendido de salarios y jubilaciones y comenzaba esta catarata de ataques, una inmensa movilización de un millar de docentes, estatales y jubilados con Amsafe Rosario a la cabeza, recorrió las calles de Rosario. La misma respuesta se reproduce en varios departamentos de la provincia. Hay una predisposición a la lucha por parte de las bases docentes y estatales. Por ello urgente la necesidad de un plenario de delegados de base  de estatales y docentes de toda la provincia, para lanzar un plan de lucha en febrero, para cuando se reúna la paritaria, para defender el salario y la cláusula gatillo. Por una paritaria libre, sin condicionamientos y por el pase a planta de trabajadores y docentes precarizados.