Los burócratas Genta y Datarmini aspiran a mantener su dominio casi vitalicio del gremio amparándose en un estatuto absolutamente proscriptivo y antidemocrático, que “requiere” reunir 1.700 avales y más de 400 candidatos para poder oficializar una lista. De todas maneras, y por primera vez en muchos años, el activismo antiburocrático se juega a poner en pie una lista propia, la Lista Gris, mediante el acuerdo de las agrupaciones de base Naranja, Marrón, Trabajador Municipal y Movimiento Independiente.

El programa de la Gris coloca a la cabeza la derogación de las leyes 471 (Empleo Público) y 472 (Obra Social), la efectivización de todos los transitorios y contratados, el aumento salarial, la liberación de las vacantes, la defensa de la salud y la educación públicas y gratuitas. No se pudo llegar a un acuerdo con la Verde, por la oposición de ésta a la derogación de las leyes 471 y 472.

Luego de la amansadora en la Junta Electoral para obtener las planillas oficiales, en apenas dos días centenares de compañeros firmaron los avales para la Gris y muchos se anotan como candidatos en nuestras listas, poniendo de manifiesto entre los municipales una tendencia que anida en todo el movimiento obrero y piquetero nacional, que es la de poner en pie una nueva dirección dispuesta a luchar hasta triunfar por las reivindicaciones de los trabajadores y por una salida obrera a la agobiante crisis nacional.

La Gris llama a los municipales a vencer el fraude y la proscripción anotándose masivamente en sus listas de candidatos.