El petitorio del 37% para los compañeros del ingenio El Tabacal y la equiparación con la escala de los ingenios tucumanos fue el eje de un reclamo obrero. Es precisamente este pliego el que se aprobó en un congreso de todas las gremiales de Salta y Jujuy en febrero pasado. Los ingenios tucumanos acordaron rápidamente un básico de 2.280 pesos y un inicial de bolsillo de 2.500. El conflicto se planteó en El Tabacal, ya que la empresa se negaba a equiparar.

Una asamblea general votó paros progresivos a partir del 19 de mayo. El acta firmada por la que se levantó el paro, lleva el básico a julio con dos escalones a 1.934 pesos que con adicional en negro lleva el inicial a 2.500. Para abril del año que viene, previo a la próxima zafra, se blanquearán sumas hasta conformar un básico de 2.280 pesos, de modo tal que en la negociación previa a la próxima zafra El tabacal partirá del mismo piso y composición del salario que los ingenios tucumanos. La patronal agrega además un aporte extra de la empresa a la obra social y la suma del 1% al presentismo.

El sindicato ha denunciado el convenio vigente ya el año pasado y ha quedado planteada una nueva paritaria para discutir categorías, condiciones de trabajo y otras cuestiones. Hasta ahora los ingenios de Salta y Jujuy pagaban salarios más bajos que los tucumanos. La perspectiva de la lucha por un convenio único para toda la actividad aparece ahora como el gran objetivo a conquistar.

Los ingenios retrocedieron de cara a una zafra con expectativas de cosecha récord y precio récord del azúcar. Además, desde enero entró en vigencia el plan de biocombustibles que tiene rentabilidad garantizada. La conquista, presentada en Buenos Aires como un 42% que no es, viene a reparar apenas un retraso salarial, pero refuerza las filas obreras en la industria más concentrada de la provincia y contribuye al replanteo de todos los salarios.