Cuando el acatamiento del paro, en Río Negro, se mantiene en un 60% durante la tercera semana, y ya aparecieron algunos sectores vaticinando que el conflicto docente caía en la localidad, se concretó una importante asamblea de padres, docentes y alumnos que votó:

Apoyo al paro docente, inmediato corte de una calle principal, estado de asamblea permanente, olla popular y corte de ruta con permanencia para Semana Santa.

 La asamblea fue contundente: “una medida a fondo”. “Este gobierno ya nos tiene podridos”, “es necesaria una pueblada”. Hubo una madre que dijo: “Esto sólo lo arregla una huelga general”.

Esta situación se reproduce día a día en otras localidades de la provincia, lo que indica que los trabajadores comprenden que el enfrentamiento con el gobierno no es cuestión sólo de los maestros, sino que está todo el pueblo atacado por la política de confiscación de “Menem-Verani” y que la única medida para pararlo es el pueblo movilizado.

Los trabajadores de Neuquén nos marcan el camino, hay que seguirlos.