Los trabajadores en lucha de Artes Gráficas Rioplatense han denunciado que la patronal de Magnetto ha resuelto por segunda vez consecutiva adelantar el cierre del diario del domingo. Así fue anunciado en el Facebook de los trabajadores de AGR-Clarín. 

Para ello, cerraron la aceptación de anunciantes con ocho horas de anticipación, adelantaron siete horas el cierre del trabajo de los redactores, e hicieron ingresar a trabajar más temprano a los obreros gráficos de Zepita, la planta donde se imprime el matutino. 

Como resultado de todo esto, Clarín del domingo saldrá con noticias viejas. A la estafa contra los trabajadores, la patronal le suma la estafa a los lectores en su obsesión por quebrar el conflicto de los gráficos de AGR, que luchan por la defensa de sus puestos de trabajo.

A raíz de esta estafa, los obreros llaman a redoblar la campaña para no comprar el diario Clarín del domingo.

El operativo se completa, denuncian los trabajadores, con un nuevo despliegue de fuerzas de seguridad en las inmediaciones de la planta de Zepita. Desde que comenzó el conflicto, el gobierno se ha congraciado con Magnetto apostando todo tipo de fuerzas represivas en los edificios del Grupo.

El impacto del abrazo sobre la planta de Zepita, protagonizado por los obreros de AGR, a raíz del cual los camioneros resolvieron no trasladar el diario y su edición no llegó al interior del país, aún está presente en las decisiones de la patronal.

Los obreros resolvieron el abrazo en repudio al desvío de materiales que se imprimían en AGR hacia otros talleres como parte de un intento de quebrar el conflicto.