El martes 20 al mediodía se realizó una enorme asamblea en el Hospital Garrahan. Su principal resolución fue convocar a un paro para el próximo jueves 29 de septiembre, entre las 6 y las 14 horas. En ese marco, habrá también una movilización al ministerio de Salud desde las 10 horas para reclamar una recomposición salarial del 80% en una sola cuota y que nadie gane menos que el costo de la canasta familiar (hoy en $180.000).

La asamblea fue originalmente convocada por la Asociación de Profesionales pero terminó conformándose como punto de confluencia entre los distintos sectores que venían realizando acciones separadas con reclamos similares. Por eso, tanto la Junta Interna de ATE como Administrativxs Autoconvocadxs fueron convocantes de ella y llevaron propuestas resueltas en asambleas previas.

También fueron de la partida lxs profesionales autoconvocadxs; numerosos sectores de trabajo hicieron asambleas o reuniones para participar, como mantenimiento o esterilización. Se constató que existe un gran empuje por abajo para impulsar una lucha común. Muchas intervenciones destacaron que la lucha es por todxs y para todxs. Que cualquier conquista debe ser generalizada y no sectorial, y que el Hospital funciona gracias al trabajo engranado y mancomunado de todas las áreas. Se expresa una fuerte conciencia de que, más allá de las divisiones que se quieran fogonear según nivel de calificación, oficio u profesión, todxs somos trabajadorxs y debemos pelear juntxs contra el ajuste de nuestras condiciones de vida.

Debates

Así como la necesidad de parar y movilizarse la próxima semana fue una decisión unánime, existieron debates sobre la extensión y continuidad de la lucha. Por un lado, muchos sectores, incluida la Junta Interna, sostuvimos la necesidad de que el paro se extendiera por 24 horas (la propuesta inicial era de 6). No es solo un problema de cantidad, sino especialmente de inclusión del resto de los turnos en la lucha -tarde, noche y franquero-. Si bien la votación mayoritaria extendió un poco el margen, pues serán 8 horas desde un horario que habilita la participación de otras tareas que se realizan por la mañana, queda el desafío de construir un plan de lucha creciente que incluya al conjunto del Hospital. Por eso, es adecuado que la Junta promueva la realización de asambleas por turno en los próximos días.

Por otro lado, también se planteó un debate respecto de la forma de continuar. La Junta Interna y muchos compañeros y compañeras autoconvocadxs planteamos que era necesario fijar la fecha de una nueva asamblea general, sin distinción de afiliación o sector, y convocada por todas las expresiones de lucha presentes. Lamentablemente, no será posible resolver el enorme atraso salarial en una sola jornada de paro y movilización; frente al terrible ajuste que estamos sufriendo, habrá que organizar un plan de lucha.

En la asamblea se constató que nada reagrupa más personas del hospital que las instancias convocadas por todos los sectores en lucha -la división nos achica-. Que se resuelva democráticamente cómo continuar es dar un paso más. Sin embargo, la Asociación planteó “dejar abierta” la fecha de una eventual convocatoria común, lo cual podría implicar dilatar indefinidamente un proceso que será mucho más provechoso si lo impulsamos en común. Seguiremos planteando ese debate y ese desafío.

Con todo al paro y la movilización

La lucha del Garrahan adopta un rumbo creciente y extendido. Nos jugaremos con todo por un gran paro y movilización el próximo jueves, que obliga a las autoridades del Hospital y el gobierno a responder: el ajuste en salud no se aguanta más. Por eso también paran residentes de CABA -con quienes se planteó confluir- y crece la bronca en los hospitales.

Arriba la lucha del Garrahan, abajo el ajuste. Unidad de las y los trabajadores.