En el marco de las jornadas del 24 y 25 de septiembre, en el hospital Gutiérrez se realizó un acto en el Hall de entrada con posteriores cortes en las calles Sánchez de Bustamante y Coronel Díaz con el objetivo de difundir y denunciar el ataque que está sufriendo la salud pública por parte de un gobierno tutelado por el FMI.

Esta actividad fue organizada y votada en asambleas tanto de residentes y concurrentes como de profesionales del hospital, dato que no es menor frente a los bloqueos a la deliberación que impone la burocracia sindical cuando se trata de organizar la lucha de los trabajadores.

Entre las intervenciones se destacó la denuncia a la nueva carrera profesional que descalifica y empeora las condiciones laborales del escalafón profesional al mismo tiempo que deja afuera de dicha carrera a Enfermería. Sector, este último, que viene reclamando la profesionalización desde hace años. Carlos Magdalena, del área de neurología del hospital, declaró: "el reclamo contra la reforma de la carrera de profesionales de salud de CABA es porque ésta significa la pérdida de derechos adquiridos por décadas y el avance del desmantelamiento de los servicios de salud pública con pérdida de su valioso recurso humano".

Otro de los ejes de intervención giró alrededor de la situación de los residentes de Nación que hace más de 3 meses no cobran y cuya dependencia, el Ministerio de Salud, acaba de ser desmantelado y degradado a Secretaría; un episodio por demás dramático que deja al descubierto la política de ajuste a los trabajadores por parte del gobierno. En esta línea, Claudia Berrondo, presidenta de la filial de la Asociación de Médicos Municipales del Hospital Gutiérrez, denunció como parte de esta orientación el proyecto hospitalario sur, que pretende compactar cinco hospitales monovalentes en uno, cuyo último episodio es el reciente decreto del gobierno de Horacio Rodríguez Larreta. También denunció la situación del Hospital Posadas, caracterizándola como un “termómetro de la salud pública nacional”.

A esto se suman los recortes en los programas de HIV y el descalabro salarial que están viviendo los trabajadores de la salud en general.

El conjunto de los participantes coincidieron en que todas estas cuestiones están atadas al objetivo estratégico del gobierno de imponer la CUS (Cobertura Universal de Salud) que no es más que el eufemismo con que el gobierno pretende dar un salto de calidad en la destruccion del sistema publico de salud y así habilitar un gran coto de negocios privados.

Cabe destacar que la jornada continuó para los residentes que ese mismo 24/9, a partir de resoluciones votadas en sus asambleas, se movilizaron con la columna del sindicalismo combativo y reclamando un plan de lucha hasta derrotar esta ofensiva. A su vez, han planteado la participación en una marcha que tendrá lugar el próximo 4 de octubre.

Como conclusión, salta a la vista que donde se organizan asambleas y se convoca a participar a la comunidad de la salud, ésta responde y se moviliza. De allí que de cara a las próximas medidas de lucha se hace necesario reforzar este método de acción, como parte de la lucha por un verdadero paro activo en la perspectiva de una huelga general que derrote al gobierno.