Sindicales

4/4/2020

El incumplimiento de la cuarentena en el municipio de Guaymallén

La irresponsabilidad de Marcelino Iglesias

El intendente Iglesias se ha anticipado a lo que vaya a pasar con el contagio del Covid-19 y en el Decreto 1089-20 resuelve que a partir del 13 de abril el 90% de la planta de personal municipal debe volver efectivamente a sus puestos de trabajo.


Esto es presentado como una “vocación” a cumplir con el vecino, pero encubre de fondo que en post de garantizar la ganancia de las privadas, no se han paralizado obras, se siguió manteniendo la atención de algunas áreas y hasta han hecho ir a trabajar físicamente al personal del Concejo Deliberante esta semana.


Si comienza a funcionar el 90% de la planta municipal ¿cómo piensa Iglesias frenar algún tipo de contagio masivo si las áreas no están acondicionadas para eso? ¿Tiene un plan sanitario para una situación así? Es evidente que no.


Ya hubieron denuncias en varios sectores que los baños no tenían jabón, las oficinas no se higienizaban, no había transporte adecuado para los agentes municipales y que los primeros días de cuarentena se quería hacer trabajar a los mayores de 60 años, con problemas respiratorios, amenazando de quitarles ítems de “unidades de servicio” del mes de marzo.


El intendente de Guaymallén ha obviado la cuarentena y  ordenó a los encargados de cuadrilla que llamen a los empleados a sus teléfonos privados diciéndoles que se presenten a trabajar por un “plus en negro” para terminar “obras”, o como en el HCD se hizo una sesión virtual, pero el personal administrativo estuvo presente físicamente.



Con esto Iglesias va en línea con el reclamo de las patronales que quieren levantar la cuarentena  y mandar a los empleados a poner en riesgo su salud y la de sus familias. No duda, va a fondo porque fusiona su cuota de irresponsabilidad y extorsión con un ajuste al salario de los municipales de Guaymallén.


No hay noticias de paritarias al igual que en todo el país y no ha puesto a disposición ninguna actitud de mejorar los salarios frente a los aumentos de precios de los alimentos.


La situación es crítica, por ej. una categoría “A” no pasa los 10 mil pesos de asignación de clase  en el municipio. Es evidente que con una canasta básica por arriba de los 40 mil pesos, nadie pueda vivir con ese sueldo.


Según los expertos, la situación se puede agravar. En este marco, Iglesias debe derogar el Decreto y mantener la cuarentena mientras se desarrolla la pandemia. Suspender toda obra municipal que no sea indispensable y reabrir paritarias de carácter urgente para discutir una recomposición salarial y un aumento significativo.


Para resguardar la salud de todos los empleados, es necesario conformar comités de higiene y seguridad electos por los trabajadores de cada sector.


Se deben respetar no solo las medidas de higiene, sino también la libertad de debate y organización de cada sector para enfrentar no solo el contagio, sino también las condiciones laborales y salariales.


Los planes de Iglesias, van a ser puestos a prueba por la resistencia de los galpones municipales como lo han hecho cuando se quiso avanzar sobre sus condiciones laborales.