Sindicales

31/7/2008|1048

El Partido Obrero en la lucha de Fate

Nuestro Partido se ha empeñado en reforzar todas y cada una de las aspiraciones de esta lucha. Pintadas y volantes han sido sistemáticamente puestos a disposición para que el conflicto se conozca.

En cada situación el anhelo ha sido realizar la tarea de una organización obrera consecuente, que lucha por un gobierno de los trabajadores y, como condición de ello, asistir a los compañeros en medio de las luchas.

Esta es la tarea fundamental de la militancia de un Partido genuinamente Obrero. Fortalecer y enriquecer la visión sobre los problemas que debe enfrentar nuestra clase y su vanguardia en medio de las luchas.

Uno sabe cómo empieza una lucha pero nunca se puede garantizar cuándo, ni cómo termina. Sin embargo sí es posible señalar algunas certezas. El fenómeno anti-burocrático y anti-patronal representado por esta fábrica de obreros tan combativos ya ha dejado sus primeras enseñanzas: lo que le ha garantizado su fortaleza ha sido, en primer lugar, que los obreros lograron desalojar a todos los elementos pro-patronales entre los delegados primero y luego de la Comisión Directiva seccional. Claro está que todas las corrientes pro-patronales han tratado de maniatar la lucha, pero el método de las asambleas se lo ha impedido sistemáticamente.

Allí, en medio de aciertos y errores, todos aquellos que honestamente representan los intereses obreros tienen la oportunidad de hacer oír su voz y proponer, votar y luchar por las resoluciones que conciten la adhesión de la mayoría de sus compañeros.

Este método es la garantía de una dirección combativa. Mientras esto no cambie (la combatividad de la dirección gremial y el método de la asamblea) todo traspié, todo yerro, podrá resolverse. Como esto parece ser un fenómeno que en Fate llegó para quedarse, este conflicto será un gran ejemplo de lucha.