El largo proceso de recesión económica, la ola de despidos y la inflación imparable están provocando una aguda crisis social. Se siente en los barrios obreros, cada vez con más fuerza, la certeza de que estamos ante una ofensiva antiobrera en regla.

 

El congelamiento salarial en los programas de empleo precario del Estado y planes sociales, que lleva 17 meses sin aumento (14 con Cristina y tres con Macri), deja a más de 1 millón de personas indefensas ante el aumento brutal de los precios de los alimentos. Es en este marco que el Polo Obrero ha lanzado una iniciativa de organización y movilización para comenzar a dar respuestas ante la crisis.

 

El lunes 7 realizamos un plenario con casi 60 delegados de Capital y provincia de Buenos Aires. Hubo numerosas delegaciones de Capital, Oeste y Sur (entre 15 y 20 cada una). El informe a cargo de la Mesa del Polo Obrero estuvo orientado a caracterizar que asistimos a choques de fondo por la tentativa del gobierno de aplicar el ajuste. El acuerdo colonial con los buitres, con el concurso de todos los bloques capitalistas del Congreso Nacional, es un ataque en regla al movimiento obrero. En este cuadro, la inflación se proyecta en un 40% anual, los despedidos entre el sector público y privado están en 100 mil y se esperan más. 

 

El plenario dio cuenta de la iniciativa lanzada una semana atrás de empadronar a los desocupados de los barrios, y convocarlos a reuniones y asambleas. Los compañeros que intervinieron en el plenario (Matanza, Moreno, Avellaneda, Capital) dieron cuenta de una crisis social más profunda de la de nuestras previsiones. Empadronamientos de una hora entre pocos compañeros consiguen anotar entre 30 y 40 personas, llegando a 60 cuando se prolongaban dos horas. Sin haber lanzado aún una campaña en regla, o mejor dicho dando los primeros pasos en la misma, obtenemos objetivos mayores a los esperados. 

 

Las cuadrillas de trabajo del programa Argentina Trabaja vienen recogiendo el pedido de trabajo por vecinos y transeúntes cotidianamente, informaron los compañeros de Esteban Echeverría.

 

Si esta tendencia continúa, podemos tener como resultado miles de empadronados por trabajo. Esto reforzará la movilización del 16, a nuestra organización, y pondrá en movimiento la lucha contra los despidos. 

 

En el plenario se informó de un acuerdo de frente único alcanzado entre la casi totalidad de las organizaciones piqueteras o de desocupados (CCC, Frente Popular Darío Santillán, Frente Popular Darío Santillán – Corriente Nacional, Pueblo Unido, Barrios de Pie, AGTACAP, MST Teresa Vive, MTR y otros) para una jornada de lucha nacional el próximo 16 de marzo con las siguientes consignas: trabajo genuino, aumento salarial, abajo el protocolo represivo.

 

De la jornada del 16 participará el Sitraic, que también lanzó un plan de lucha por trabajo para los obreros de la construcción.

 

Finalmente, el plenario votó un plan de asambleas, campaña de financiamiento para la agitación con volantes, pintadas y afiches, empadronamiento tres veces por semana y organización del gran piquetazo el día 16.