Sindicales

16/10/2003|821

El valor de la denuncia

Las tres mujeres que denunciaron al dueño de Tío Salim por intentar revisarlas han protagonizado un episodio ejemplar, del cual las mujeres debemos sentirnos orgullosas.


¿Cuántas empleadas domésticas, trabajadoras en negro, en los supermercados, contratadas, han vivido esta situación en muchos lugares de nuestro país?


Estas jóvenes mujeres, desde San Lorenzo, levantaron tarjeta roja para todos los negreros y abusadores.


¿Cuántas mujeres deberán soportar a diario humillaciones, bajo la amenaza de ser despedidas, sin que nadie se entere, porque nadie las ha registrado?


Las mujeres que no ganamos ni 300 pesos, que no tenemos trabajo, que nos hemos visto obligadas a cortar rutas para defender nuestros planes Trabajar, las que estamos en los sindicatos y peleamos por la salud y la educación, nos sentimos identificadas con esta denuncia y las acompañamos en este gesto de dignidad que tomamos como ejemplo.