Este jueves 6 de septiembre se desarrollaron las elecciones en la CTA-T en todo el país. En La Matanza, el resultado de la elección fue 1868 (68,5%) votos a la Celeste y 968 (31,5%) a la Multicolor, que obtuvo de este modo la minoría en la comisión directiva. 

Objetivamente es la mejor elección de la oposición en la seccional en lo que hace a la CTA. De la última elección a esta aumentamos de 600 a 900 votos. Ingresamos por primera vez a la comisión directiva como minoría -se entraba con el 20%- y conquistamos una decena de congresales. Estos puestos de lucha estarán al servicio de seguir impulsando un Congreso de bases de la CTA y las centrales, para votar un programa de salida de esta crisis de la mano de la clase obrera, con sus métodos -paro activo y la huelga general- para terminar con Macri, el FMI y los gobernadores.

El contexto de la elección

El comicio tuvo lugar en un cuadro de derrumbe del gobierno de Macri, con sus consecuencias políticas, económicas y sociales. Particularmente en el aspecto educativo, la crisis se manifiesta en el ajuste de Vidal que sigue manteniendo a los docentes con salarios congelados desde el año pasado y fue la responsable junto a todos sus funcionarios, de la masacre social de Moreno que se cobró la vida de Sandra y Rubén.

Ante esta política la dirección del Suteba y la CTA-T han jugado un rol de contención de las enormes tendencias de lucha que anidan en la docencia, con la idea de "votar bien en el 2019" y garantizarle la gobernabilidad al derechista de Macri y sus cómplices del PJ. Una muestra de ello fue el acatamiento de la conciliación obligatoria trucha de Vidal y los paros en cuotas de las últimas semanas mientras que luego del receso, la docencia estaba dispuesta a ir hacia una huelga general educativa.

Por su parte la CTA sigue jugando de segundo violín del moyanismo y llama a un paro para la segunda semana de septiembre en línea con la orientación de la CGT de realizar un paro para descomprimir la bronca creciente de los trabajadores, es decir, sin perspectiva ni plan de lucha.

Nuestra campaña

Debido a la política sistemática de vaciamiento de la central en manos de la lista celeste, la elección no fue vista por la gran masa docente como una lucha decisiva, sin embargo para un sector significativo de docentes la defensa de la política multicolor como dirección combativa y, la necesidad de trasladar esa perspectiva a la CTA, fue tomada como propia y se sumaron a la campaña: llevando los folletos de campaña de Tribuna Docente, difundiendo los materiales de la Multicolor en redes sociales y sumándose como fiscales.

La campaña que desarrollamos desde Tribuna Docente estuvo centrada en explicar la necesidad de una dirección clasista y de lucha en la CTA para derrotar a Macri, los gobernadores y su plan de guerra contra los trabajadores. Fue la conclusión que dejó planteada el Plenario del Sindicalismo Combativo en Lanús y que ahora tiene sus réplicas en diferentes provincias del país. Los compañeros y compañeras de Tribuna Docente estuvimos presentes y recorrimos las diferentes asambleas y conflictos de cada escuela de Matanza en relación a la lucha por arrancar al gobierno de Vidal los recursos para reparar los problemas edilicios de las escuelas. Editamos un folleto en papel con un planteo programático mostrando el antagonismo político y de método con la actual conducción de la CTA. Este, fue el único material impreso que polemizó con el volante de la celeste. También elaboramos distintos contenidos para las redes sociales.

Una fiscalización para combatir el fraude

Es sabido que en las elecciones de las CTA el fraude es escandaloso. 

Las maniobras fueron de todo tipo y color antes durante y después del comicio: hicieron público el padrón tres días antes de la votación, las credenciales de los fiscales nos fueron entregadas 48 hs antes, se infló el padrón, durante la elección la página web se "cayó" y los compañeros no podían saber en qué escuela votaban. 

Sobre la base de esta caracterización y de constatar que estábamos en condiciones de garantizar la fiscalización de todo el comicio, nos dimos la orientación de cubrir incluso las mesas de movimientos sociales.

De los 350 fiscales de la Multicolor, Tribuna Docente aportó 250, es decir, nos decidimos a dar una verdadera lucha contra el fraude. El rigor con que los fiscales desarrollaron su tarea logró reducir el margen del fraude que se pretendía convalidar contra la Lista 6.

Un ejemplo solo como muestra: una fiscal designada en una urna de un movimiento social cuando llegó a la dirección se encontró con un terreno baldío, resulta que la sede verdadera se encontraba… ¡a 7 kilómetros de allí! La compañera fue a esa dirección. En esa urna de un padrón de 1100 afiliados, votaron 4. Párrafo aparte para otra sede de un movimiento social a la que fueron nuestros fiscales y que nunca existió. 

Para Mariano

En cada lucha donde se abre paso un programa socialista para el movimiento obrero está presente nuestro querido compañero Mariano Ferreyra. Para él y para todo el activismo que construye la Multicolor, dedicamos este avance del clasismo