Por segunda vez consecutiva, el Concejo Deliberante postergó el tratamiento del aumento de boletos pedido por el Ejecutivo municipal. El PJ no logró conseguir los votos necesarios para el tarifazo, y ante la firme decisión de los choferes de ir al paro, postergaron la sesión. El gremio de la UTA viene reclamando un 36% de aumento salarial. Para ello, Kiener, electo concejal por el PJ y dirigente gremial, reclama un aumento tarifario o una mejor redistribución del subsidio nacional del gasoil a las empresas. Ambas salidas implican beneficios propios ya que él mismo es parte de la patronal.

 

Por su parte, el interbloque conformado por el PS-UCR-ARI se niega a aumentar el boleto “en defensa de los usuarios” (a la inversa de Rosario, donde aprobaron un aumento del 45% en el boleto urbano). Apelan a una “solución de fondo” que no es más que un mayor subsidio a las patronales.

 

Unos y otros se niegan a denunciar el vaciamiento patronal y las millonarias ganancias que las empresas se llevan. Es decir, no quieren que la patronal se haga cargo del aumento salarial.

 

Los choferes están dispuestos a continuar con las medidas hasta el final. Los concejales postergaron por unanimidad el tratamiento del tema para que no afectara la Semana Santa. Los estudiantes, por su parte, han salido nuevamente a la calle repudiando el tarifazo y solidarizándose con los trabajadores. El PJ creó un aparato vacío entre los secundarios, que se llama UES para evitar que se unifiquen los reclamos y actuar de presión con los concejales. Para romper esta política patronal, es necesario que nos organicemos de manera independiente del Estado y sus punteros.

 

Planteamos: aumento salarial a los choferes del 36% ya; abajo los tarifazos; no a los subsidios a las patronales; gestión obrera del transporte.